Los salarios españoles tienen que bajar en relación a los alemanes durante los próximos cinco o diez años, según la Asociación Española de Banca (AEB), que ha explicado que "esto no supone rebajas de sueldo, sino que la competitividad medida con Alemania mejore".

Durante su intervención en las jornadas financieras organizadas por BBVA y la APIE en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Santander, el presidente de la asociación bancaria, Miguel Martín, ha precisado que esto significa que "si Alemania no aumenta sus salarios, España mucho menos, porque el principal problema de la economía de este país es la competitividad y la manera de ganarla es en términos salariales".

Para la AEB, "el problema de la competitividad significa que España tiene un déficit en la balanza de pagos, por lo que hay que conseguir que los sueldos españoles se aproximen a los sueldos reales, ponderados por la productividad, de los alemanes".

Según Martín, la solución pasa por mejorar la competitividad, aumentar las exportaciones y reducir las importaciones, "pues no es un problema de subir impuestos y reducir cotizaciones sociales".

"Si nuestros rivales son los alemanes, tenemos que hacerlo mejor que ellos, porque si con eso generamos un superávit en la balanza de pagos, podremos devolver nuestra deuda", ha aseverado el presidente de la AEB, para quien "éste es el verdadero problema, no el déficit público ni los bancos".

"Difícil desafío"

No obstante, la asociación bancaria es consciente de que "este es un desafío muy difícil, ya que la inflación alemana durante los próximos años será cero", pero ha insistido en que la "única" solución para España es practicar la devaluación interna, "aunque es un proceso duro, extremadamente complicado y casi imposible de llevar a la práctica desde la política".

Por último, Miguel Martín ha destacado que, "si toda la destrucción de empleo y de empresas que se ha producido en España se aprovechase, mejoraría la productividad en su conjunto, porque estarían sobreviviendo los mejores".

"Se trata de que las empresas que han sobrevivido y que son las mejores sigan haciéndolo bien y que las nuevas ya partan con ese nivel de productividad", ha remarcado el presidente de la AEB, quien ha añadido que "en definitiva, de lo que se trata es de que todos los españoles hagan su trabajo mucho mejor".