El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha adelantado que las entidades financieras que requieran de ayudas públicas podrían tener que segregar sus activos tóxicos del balance, entre una de las condiciones "horizontales" que negocia el Gobierno con la UE para el sector financiero español.

En la Comisión de Economía del Congreso, De Guindos resaltó la "preferencia" de la CE por esta "medida adicional" en el marco de las condiciones que llevará aparejada la línea de crédito de hasta 100.000 millones de euros para el sector financiero español.

Según precisó el ministro, el Ejecutivo también está negociando que las entidades con ayudas deban presentar un plan de reestructuración de acuerdo con las normas de ayudas de la UE.

Asimismo, explicó que también habrá condiciones horizontales para el conjunto del sector financiero, que perseguirán fortalecerlo y corregir las vulnerabilidades existentes.

De Guindos reafirmó que la ayuda sólo se condicionará al sector financiero y defendió que la supervisión fiscal se hará de "forma independiente" sobre los nuevos requisitos del sector financiero.