Con la cartera llena de deberes hechos por el Consejo de Ministros y corregidos por la profesora Merkel llega hoy Mariano Rajoy a Bruselas para participar en su primera reunión en un Consejo Europeo como presidente del Gobierno de España. No va a ser fácil. Trae entre manos el objetivo disimulado de lograr de sus socios más tiempo para cumplir el compromiso de reducir el déficit.

Tal objetivo no es admitido oficialmente por el Gobierno. Pero está claro si se interpretan las últimas declaraciones del propio Mariano Rajoy, del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro y del de Economía, Luis de Guindos. Al ser preguntado Rajoy esta semana en Lisboa por un posible retraso en los objetivos contestó: "Eso se verá en su momento. España va a cumplir los objetivos de déficit que se marquen en el programa de estabilidad; hoy es el 4,4% y España hoy va a cumplir ese objetivo".

Pasar de un déficit de alrededor del 8% del PIB en el 2011 a otro del 4,4% en el 2012, con una economía para la que el Fondo Monetario Internacional augura una recesión del 1,7% este año, es casi imposible.

La baza con la que cuenta el Gobierno es la de las nuevas previsiones macroeconómicas que la Comisión Europea debe formular. A principios de diciembre, la CE aún abrigaba una previsión de crecimiento del 0,7% para España en el 2012. Con casi total seguridad, las nuevas previsiones que se deben conocer a finales de febrero incluirán un pronóstico de recesión para la zona euro y, de forma más grave, para España.

Con ese dato en las manos y con la tarjeta de visita de ser un Gobierno que en su primer mes ha aprobado un ajuste del 1,5% del PIB y una durísima ley de disciplina presupuestaria para embridar las cuentas de las autonomías, y que puede presentar un acuerdo de moderación salarial pactado entre los agentes sociales, Rajoy espera lograr un respiro de la UE.

Oficialmente se hablará de crecimiento y empleo. De có- mo aplicar los fondos estructurales aún no asignados a fomentar el empleo juvenil. España también propondrá controlar las retribuciones de los directivos de las entidades financieras que han recibido ayudas públicas, así como el desarrollo coordinado en toda Europa de un sistema de capitalización de la protección por desempleo siguiendo el modelo austriaco. La agenda de hoy de Rajoy incluye también una entrevista con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, con la presidencia danesa de turno y otra posible con David Cameron, primer ministro británico.