¿Qué es lo que más le gusta y anima a un inversor? La respuesta que presenta un menor margen de error es esta: su juego favorito son las operaciones corporativas, léase fusión, compra o absorción. Y cuanto más grande, mejor. La mejor prueba es el sedante efecto que ha tenido en los mercados de todo el mundo la decisión de AT&T, la segunda operadora de móvil de Estados Unidos, de comprar a Deutsche Telekom su filial en el país, el cuarto operador, por unos 27.500 millones de euros, una cantidad equivalente al 2,7% del PIB español.

Las bolsas mundiales acogieron la noticia, dada a conocer el domingo, con ánimos compradores. ¿Echamos las campanas al vuelo? Mejor que no. Las incertidumbres que provocaron las caídas de la semana pasada siguen abiertas. La crisis nuclear de Japón parece controlada, pero sigue abierta, y el Banco Mundial ha anunciado que el país necesitará entre 122.000 y 235.000 millones de dólares para reconstruirse, lo que equivale a hasta un 4% de su producto interior bruto (PIB).

La entrada de la coalición internacional en el conflicto libio también genera temores en los inversores. Algunos analistas destacan que no entienden el objetivo de la misión (no está claro que vaya a suponer la caída de Muamar el Gadafi) ni el tiempo que podría tardar en desarrollarse. Una incertidumbre que tiene su mejor plasmación en el precio del petróleo, que ayer escaló hasta los 115 dólares por barril.

Con todo, la posición relativa de España en la jungla de los mercados está mejorando poco a poco. "España ha decidido sobre un número muy importante de vías para su propia mejora y estas no son fáciles necesariamente y no rinden inmediatamente, pero parece que van en la dirección correcta", aplaudió ayer el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet. La prima de riesgo de la deuda del Estado --posibilidad de impago percibida por el mercado-- cayó hasta los 190 puntos básicos, un nivel que no alcanzaba desde el pasado 2 de febrero. El desatascamiento del pacto del euro, que los líderes europeos tienen previsto aprobar a finales de semana, ha sido clave. Pero el Tesoro tendrá otro examen hoy, ya que subastará letras a tres y seis meses por valor de hasta 4.000 millones de euros.

El Ibex 35 subió el 2,38%, hasta los 10.574,4 puntos, con una Telefónica pujante (2,25%) a raíz de la operación de AT&T. Ya se sabe, cuando un jugador mueve ficha, las miradas se vuelven a sus contrincantes, de los que se espera alguna respuesta. La línea roja de los 10.070 puntos del selectivo español se aleja, pero mejor andarse con ojo.