El ministro de Fomento, José Blanco, se sumó ayer a la campaña oficiosa del Gobierno a favor de un cambio en el modelo tributario español. Ayer dejó clara su posición, según la cual los impuestos españoles son "muy bajos", por lo que en un futuro, que no precisó, habrá que pensar en fórmulas para "homologarlos" a la media de la UE, con el objetivo de lograr servicios e infraestructuras "de primera".

"No estoy planteando una subida de impuestos --precisó--, simplemente digo, como reflexión, que España, en relación con los servicios públicos que tiene, y en relación con las infraestructuras que tiene, y que debería seguir desarrollando, cuenta con una base impositiva muy baja respecto a la media de los países europeos", planteó el titular de Fomento.

Blanco se une así a los comentarios que diferentes miembros del Ejecutivo, incluido el propio presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, han realizado en los últimos meses en torno a la conveniencia de subir la presión fiscal. Se trata, en todo caso, de un debate que, previsiblemente, se planteará en la tramitación parlamentaria de los presupuestos para el 2011, a partir del próximo mes de septiembre. La incógnita por despejar es si ello afectará a los tramos del IRPF, si se rescatará el impuesto sobre el patrimonio o si se creará una nueva figura impositiva.

Por el momento, el Gobierno ha confirmado en varias ocasiones que su intención es subir impuestos para las rentas más altas. "Si hay que pedir nuevos esfuerzos a los españoles lo haré, lo haré en los presupuestos .... La idea del Gobierno es que esos esfuerzos van a ser para aquellos con alta capacidad económica", dijo Zapatero en el último debate sobre el estado de la nación.

EN LOS PROXIMOS DIAS Blanco aclaró ayer, en una entrevista con Europa Press, que no habrá que esperar mucho para saber si hay subida y para quién: "Cuando abordemos el Presupuesto General del Estado para el 2011 en los próximos días, los ciudadanos conocerán la política de ingresos y gastos".

El coordinador de Economía del PP, Cristóbal Montoro, dio por hecho ayer también que, en el debate presupuestario, el Gobierno planteará una subida de impuestos "para todos", para "cuadrar" las maltrechas cuentas públicas. "A la vista del techo de gasto van a seguir subiendo los impuestos sobre carburantes, el tabaco, el alcohol y también el IRPF. Es decir, una nueva subida de impuestos para todos".

TECHO DEL GASTO El portavoz económico del PP aprovechó para cargar contra lo que se considera el primer paso para sacar adelante los presupuestos: el techo del gasto, ya que, según dijo, no incorpora la austeridad "necesaria" para insuflar confianza y fiabilidad a la economía.

El Congreso aprobó en julio, solo con los votos del PSOE, el límite presupuestario propuesto por el Gobierno, fijado en 122.256 millones, el 7,7% menos que en el año anterior. "No hay la austeridad que debería haber", dijo Montoro.