La nueva Gas Natural invertirá unos 9.000 millones de euros hasta el 2012 y mantendrá un ritmo de crecimiento de los dividendos del 10% anual. Esos son dos de los ejes de la política de la compañía una vez aprobada ayer por mayoría la absorción de Unión Fenosa por la junta de accionistas de la gasística. El lunes acabará el proceso con la ratificación de la operación por parte de la junta de la eléctrica, de la que Gas Natural posee el 95,22%.

Las inversiones, que se concretarán a través de un plan estratégico 2009-2012, se reducen en unos 12.000 millones con respecto a lo previsto por las dos compañías por separado. Ello se debe a que su unión supone que se ahorrarán los recursos que reservaban para crecer mediante compras y fusiones, dijo el consejero delegado, Rafael Villaseca.

COMO UN RELOJ La de ayer fue una junta plácida en la que el presidente, Salvador Gabarró, repasó los hitos de la empresa, desde la originaria Sociedad Catalana para el Alumbrado por Gas hace 166 años. Afirmó que la compra de Unión Fenosa para crear la tercera energética española y primera compañía integrada de gas y electricidad ha funcionado "como un reloj suizo" y "será considerado uno de los hechos más importantes en la historia de la compañía".

Gabarró admitió ante los accionistas que la operación supone "un sueño empresarial perseguido desde el 2003". Con la integración, Gas Natural dobla su tamaño al pasar de activos por valor de 18.675 millones de euros a 38.113 millones.