El presidente de Andalucía, Manuel Chaves, ha acusado hoy al PP de adoptar una postura "cínica" en relación con la intervención del Banco de España en la Caja Castilla-La Mancha (CCM), que ha aplaudido, y de aumentar la "zozobra" e inquietud" de los ciudadanos para que desconfíen del sistema financiero.

Durante su discurso en la reunión en Madrid de la interparlamentaria de los socialistas andaluces, Chaves se ha referido a la intervención de la caja castellano-manchega y ha dicho que el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, defendía hace unos días esa intervención y "ahora la critica".

Ha recordado Chaves el proceso de fusión que iniciaron CCM y la caja andaluza Unicaja en función de sus competencias y que los gobiernos de ambas comunidades apoyaron políticamente.

Sin embargo, y en defensa de sus intereses, ambas cajas no llegaron a un acuerdo y rompieron las negociaciones por decisión propia.

Así, Manuel Chaves ha opinado que en el caso de Unicaja se rompió la negociación en función de los intereses de sus depositantes y ahorradores y ha dicho que la Junta de Andalucía "respaldó la decisión que en el ámbito de su competencias adoptó el consejo de administración".

"Ha sido decisión de las cajas iniciar y terminar la negociación y ha sido decisión del Banco de España y no del Gobierno intervenir" en la CCM, una "buena decisión", a su juicio, porque da seguridad a los depósitos y a sus titulares.

No entiende Chaves que el PP "se rasgue ahora las vestiduras" y no quiera mirar a su entorno, donde los bancos centrales y la Reserva Federal de EEUU han destinado centenares de millones de euros para intervenir bancos.

La conclusión que Chaves saca de la actitud del PP es que a este partido lo que le interesa es "aumentar la inquietud y zozobra de los ciudadanos para que desconfíen del sistema financiero español", la misma actitud, ha agregado, que ha adoptado ante la crisis.

De este modo, el presidente andaluz ha denunciado el "cinismo" e "hipocresía" del PP, al que "lo mismo le da una cosa que otra" porque "un día dicen una cosa y otro la contraria y se quedan absolutamente tranquilos".