Alistair Darling, ministro de Finanzas británico, ha denunciado el secreto bancario de los bancos suizos, una situación que desde su punto de vista no se puede "tolerar" por la evasión fiscal que supone. Estas manifestaciones se producen en medio de la polémica levantada por UBS, que se ha visto obligado a pagar una sanción económica impuesta por EEUU, que le responsabiliza de colaborar con ciudadanos norteamericanos para evadir impuestos y al que exige la identidad de los clientes que no cumplen con el fisco de su país.

El ministro británico cree que las autoridades helvéticas deberían reformar las leyes fiscales y bancarias para alinearlas con las que funcionan en Europa.