Una vez que José Luis Rodríguez Zapatero no ha tenido más remedio que admitir que la economía española crecerá este año por debajo del 2%, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, no ha tenido empacho en avanzar que la tasa de paro estará próxima al 11% en el 2009. Esta cifra significa un punto y medio más que ahora, es decir, 300.000 desempleados adicionales partiendo de los niveles actuales de población activa, o lo que es lo mismo, supondrá terminar el próximo año con una cifra de parados cercana a los 2,5 millones de personas.

DESEMPLEO RECORD La crisis se está llevando como un vendaval los logros laborales de los primeros cuatro años de Zapatero. Aunque el Gobierno apenas lo publicitó en su día, la tasa de paro en España estaba en el 8,6% hace apenas seis meses, por debajo de la media europea. Este nivel supuso todo un hito máxime cuando el partido socialista heredó del PP un nivel de paro que superaba el 11,5%, justo medio punto por encima de las peores previsiones de Corbacho.

El ministro de Trabajo se aventuró ayer a rectificar en solitario las últimas estimaciones de empleo que hizo públicas el Gobierno el pasado 30 de mayo y que, hasta ayer, ningún miembro del Ejecutivo socialista se había atrevido a modificar.

Los presupuestos para el 2008 estimaban que el paro en este ejercicio podía terminar en una tasa del 8,2%, y del 8,1% en el 2009. En mayo, el Gobierno se vio obligado a rectificar y situó el nivel de desempleo previsto en el 9,8% para el 2008 y elevó la tasa hasta el 10% para finales del 2009. Ayer Corbacho no tuvo más remedio que ser realista y admitir que, en el 2009, cuando el Gobierno espera vislumbrar el final del túnel, la tasa de desempleo aún "estará más cerca del 11% que del 10%".

El volumen de paro depende siempre de dos variables: del número de personas que están buscando un empleo y que, por tanto, se consideran población activa, y de la capacidad que tienen las empresas para absorber esta demanda de trabajo. Corbacho resaltó ayer que, en los últimos 12 meses la población activa en España ha crecido en 651.000 personas (lo que supone un 3%), un número difícilmente asumible por las empresas con la desaceleración económica. Esto, unido a la crisis del sector de la construcción, es lo que está originando una "situación preocupante" en el mercado laboral, explicó el ministro.

CINCO LINEAS ESTRATEGICAS El origen del aumento del paro no hay que buscarlo en "causas laborales sino económicas", dijo el titular de la cartera. Trabajo tiene pensado incidir en cinco líneas estratégicas para abordar este problema. El primer objetivo será presentar un catálogo de nuevas ocupaciones para los jóvenes, colectivo que soporta un 24% de desempleo, y trabajos compatibles con los estudios. Al mismo tiempo se ofrecerán a las mujeres nuevos recorridos de empleabilidad.

ALARGAR LA VIDA LABORAL También será necesario prolongar la vida laboral efectiva de los trabajadores hasta los 65 años (ahora de media pasan al retiro a los 62 años) y evitar las prejubilaciones injustificadas. Se facilitará la creación de empresas y acceder al trabajo por cuenta propia y se modernizarán los servicios públicos de empleo para que funcionen como una red de intermediación de ofertas de empleo entre los territorios.