El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, anunció ayer, en declaraciones a este diario, que el programa electoral del PSOE incluirá un compromiso de incremento del salario mínimo interprofesional (SMI) hasta un nivel que rondará los 800 euros. Según Caldera, la mejora en la próxima legislatura, hasta el 2012, tiene que ser todavía más importante que la registrada desde que José Luis Rodríguez Zapatero llegó a la Moncloa en el 2004.

El Gobierno subirá el SMI, a partir de enero del 2008, a 600 euros al mes, lo que significa una revalorización de 140 euros, equivalente al 27%, desde el 2004. Cuando Caldera fue nombrado ministro de Trabajo, el SMI era de 460,50 euros después de cinco años en los que creció solo un 2% anual con el PP.

Pese a situar la mejora del SMI como uno de los logros sociales del Ejecutivo socialista, Caldera admite que los 600 euros mensuales no son todavía suficientes como indicador mínimo para las nóminas de los trabajadores en España. Sin embargo, la fuerte subida ya ha tenido un efecto arrastre sobre las remuneraciones de algunos convenios que estaban por debajo del SMI y que han tenido que subir.

NOMINAS AL ALZA Los sindicatos CCOO y UGT confían en que el incremento continuado del salario mínimo que fija Trabajo siga empujando al alza las nóminas de los submileuristas, que representan alrededor de un tercio de todos los asalariados que no llegan a la categoría de mileuristas puesto que cobran menos de 1.000 euros mensuales.

UGT y CCOO reclaman al Ejecutivo que cumpla con el objetivo europeo de situar el salario mínimo en el 60% del sueldo medio, lo que en España equivale a unos 1.000 euros. Los sindicatos quieren aprovechar la proximidad de las elecciones generales para arrancar compromisos de mejora del SMI de los partidos políticos, incluido el PSOE.

Caldera indicó que pretende consultar con las centrales sindicales el calendario de una subida gradual para la legislatura que se abrirá tras los comicios de marzo. El resultado de esas consultas servirá al coordinador del programa electoral socialista para fijar el objetivo del SMI hasta el 2012. Sin embargo, el ministro de Trabajo avanzó ayer que será imposible alcanzar los 1.000 euros en un plazo de cuatro años. Según Caldera, hay que hacer compatible el fuerte aumento que prevé para el SMI con el mantenimiento de un buen ritmo de crecimiento económico y de generación de empleo.

El ministro recordó que los trabajadores acogidos a convenio colectivo han mejorado su poder adquisitivo en más de un punto por año desde hace tres años. "Y eso no ha sido un obstáculo para el crecimiento económico", subrayó Caldera.

PENSIONES MINIMAS La mejora de las condiciones salariales de los trabajadores debe ir acompañada de nuevos aumentos de las rentas bajas de los pensionistas, según el ministro de Trabajo. Sin embargo, Caldera dejó claro que existe el límite de las pensiones contributivas, que no se pueden igualar con las mínimas --que perciben un complemento no contributivo--. La pensión media de jubilación es ahora de 762 euros, frente a una paga mínima que puede llegar a los 606 euros.

La última reforma de la Seguridad Social, que aumenta a 15 años efectivos el periodo que sirve para calcular la pensión, dará al sistema público un periodo de 15 a 20 años de "estabilidad y superávit", según el ministro.