La fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) considera "inadmisible" la sentencia que culpa a un trabajador del accidente que le dejó tetrapléjico y absuelve a una empresa que incumplía las medidas de seguridad. La fiscal que coordina los casos de accidentes laborales, Raquel Amado, dijo a este diario que el fallo de la Audiencia de Barcelona contradice "de forma inexplicable" la doctrina del Tribunal Supremo.

La decisión no sólo supone un mazazo contra el trabajador al perder una indemnización de 381.548 euros (63,4 millones de pesetas), sino también contra la fiscalía, que había presentado cargos contra la empresa junto con la acusación particular.

SEGURIDAD DEFICIENTE

La falta de protección en un hueco de la fachada del edificio en construcción por el que cayó el trabajador "tuvo relación directa con el resultado del accidente" por lo que se puede considerar un delito penal por el riesgo y las lesiones, según Amado.

La sentencia reconoce el incumplimiento de las normas de seguridad de la empresa, aunque concluye que el accidente se debió a la "conducta imprudente" del albañil, Enrique Pociños, al subirse en un caballete inestable y no negarse a asumir ese riesgo.

Pero el Tribunal Supremo establece que "la imprudencia del trabajador nunca anula la del empresario, sino que obliga a valorarla y a rebajar la pena y la indemnización", según la fiscal. El fallo choca con las instrucciones del fiscal general del Estado de prestar atención en la lucha contra la siniestralidad laboral.

El ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, se sumó ayer a las reacciones críticas a la sentencia al asegurar que no coincidía con su contenido. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, tachó la resolución de "grotesca y retrógrada", y CCOO, de "despropósito jurídico".