El sueño de Boisson hace añicos a Andreeva

París sigue soñando en grande gracias a la gesta de su inesperada heroína, Lois Boisson. La número 361 del mundo sigue rompiendo barreras y se ha plantado en semifinales de Roland Garros después de derrotar a Mirra Andreeva (7-6 y 6-3) en una nueva demostración de despliegue físico y de capacidad de resistencia y superación.

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Una gesta para la historia que la convierte en la jugadora con peor ranking en alcanzar unas semifinales de Grand Slam desde 1980, en su primera participación además en uno de los cuatro grandes torneos del circuito. Solo habían conseguido acceder a semifinales en su debut Monica Seles (RG 1989) y Jennifer Capriati (RG 1989).

Remontó tanto en el primero como en el segundo set para acabar desquiciando a la pupila de Conchita Martínez y seguir haciendo soñar a París y toda Francia, que volverán a ver a una semifinalista local desde 2011.

Mary Pierce fue la última en conseguir acceder a la final en su casa (2005) y también la última en levantar el título (2000).

COCO EN 'SEMIS'

En semifinales este viernes, la francesa se medirá a Coco Gauff que superó a la campeona en Australia, Madison Keys, teniendo que sobreponerse al marcador adverso inicial. La tenista estadounidense supo resistir en el peor momento para acabar imponiendo su calidad y su potencial para sumar la 25ª victoria en París, siendo la mujer más joven en conseguirlo desde Martina Hingis.

Una de las dos tendrá el billete para la gran final, donde se medirán bien a Swiatek o bien a Sabalenka, que lucharán en la otra semifinal, con claro sabor a final.

El duelo entre las dos grandes dominadoras de la tierra batida será uno de los más esperados en los últimos años en el tenis femenino, con el recuerdo de la gran final del Mutua Madrid Open del pasado año en el recuerdo, siendo uno de los mejores partidos de la historia reciente.

Será el duelo número trece entre ambas, con un balance de 8-4 favorable a la polaca, sin un solo precedente en la arcilla parisina, que ansiaba el duelo entre ambas desde hacía años. Desplegando un juego espectacular tanto una como la otra, Roland Garros verá el mejor partido posible sobre la tierra batida, que bien puede calificarse como la gran final anticipada.