Fútbol
La violencia verbal de los ídolos se traslada al fútbol base
La crispación en torno al estamento arbitral, alimentada en las Ligas profesionales, ha generado un clima límite

El colegiado jiennense Munuera Montero durante la acción de la expulsión de Bellingham, el pasado sábado. / EP

El fútbol base, concebido como un espacio de formación y aprendizaje tanto deportivo como personal, se enfrenta a un problema creciente: la violencia verbal. Un fenómeno que, lejos de ser aislado, parece encontrar su origen en los niveles más altos del fútbol profesional. Así lo señala Pedro Benítez, delegado provincial del Comité Técnico de Árbitros de la RFAF, quien advierte de la preocupante influencia que los comportamientos en las Ligas profesionales están teniendo sobre el fútbol formativo: «Todo lo que viene de arriba repercute negativamente en el base. Se está notando. Al final, el ejemplo luego se ve reflejado, tanto en actitudes, insultos, malos gestos... La violencia verbal se está produciendo todos los días», explica el cordobés en declaraciones a este periódico.
Y es que el efecto cascada de la tensión mediática y la presión sobre los árbitros en el fútbol profesional viene traduciéndose en una mayor crispación a todos los niveles, también en las categorías inferiores o sénior. La figura del colegiado, precisamente, por momentos pasa a ser un «blanco» de críticas y hostilidad que, a menudo, igualmente se alimenta desde la grada.
Protocolos contra la violencia
Ante esta realidad, se han implementado medidas para frenar las agresiones verbales en los terrenos de juego. Uno de los protocolos más extendidos permite la paralización de los encuentros si se detectan insultos o actitudes violentas por parte del público: «Algunos clubes tratan de promover el respeto también entre los padres y madres, que se lo inculquen a sus hijos», señala. Sin embargo, no siempre es suficiente. Cuando se produce una agresión verbal, el árbitro debe notificarlo al delegado de campo, quien tiene la responsabilidad de calmar la situación o, en el caso de producirse un segundo aviso, optar por «paralizar el partido o bien suspenderlo definitivamente si el incidente no llegara a solucionarse».

Lance de un encuentro de fútbol base en la Copa Covap. / CÓRDOBA
Del mismo modo, esta problemática no solo se afecta estrictamente al ámbito de los jugadores, sino también al propio estamento arbitral, que a diferencia de sus representantes en las categorías profesionales, a menudo no dispone de los mismos niveles de «protección». «Los árbitros arriba, en Primera y Segunda División, tienen su respaldo, lógicamente, pero en el fútbol base o en el sénior provincial esto no es así, y todo se está viendo afectado muy negativamente», recalca Benítez.
Cuestiones como la «accesibilidad» en los campos de fútbol modesto también juega un papel determinante. En un estadio de «élite», sin ir más lejos, las distancias entre el público y los protagonistas del juego imponen una barrera natural que limita los enfrentamientos directos. En el fútbol no profesional o base, esa separación se limita. «La impunidad no es como en un campo profesional, aquí es mucho más fácil acceder a un colegiado, a un árbitro, para insultar o viceversa», apunta.
En el foco mediático
En este escenario, el ejemplo más claro, al igual que reciente, bien podría ser el incidente del pasado sábado producido durante la visita del Real Madrid al Estadio El Sadar, hogar del Osasuna. El colegiado designado para la cita fue el jiennense José Luis Munuera Montero, perteneciente al colegio andaluz. Tras un lance de la misma, una protesta del visitante Jude Bellingham, que acabó rematada con un «fuck off» -expresión de carácter despectivo en inglés-, se saldó con la tarjeta roja para el futbolista del cuadro blanco, en una acción que desde entonces ha traído cola.... «En estos últimos meses ha quedado evidenciado el ataque desmesurado hacia el colectivo arbitral, en esta última ocasión siendo yo el protagonista», reza un escrito del propio Munuera Montero.
Y es que poco después de dicho enfrentamiento se dio a conocer una investigación cursada por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) acerca de los negocios privados del árbitro, estudiando su «compatibilidad» con la labor arbitral y, en caso de haberlo, detectar un presunto «conflicto de intereses», que, por el momento, mantiene al trencilla sin asignación para dirigir próximamente. «Anticipo que ejercitaré las acciones civiles y penales correspondientes contra aquellos medios que de manera intencionada o temeraria han difundido falsedades», aseguró al respecto.
Otro movimiento paralelo en estas fechas, concretamente el miércoles, fue la reunión del colectivo de árbitros y árbitras profesionales en Madrid, con el objetivo de enviar un mensaje de unidad: «Somos profesionales que vamos a hacer nuestro trabajo de la mejor manera», afirmó el internacional José María Sánchez Martínez, tras una asamblea en la que el eje fue «analizar la alarmante e insostenible situación» que se atraviesa.
Un cambio de mentalidad
Más allá de las normativas y protocolos, de esta forma, el debate sobre la violencia verbal en el fútbol base pone sobre la mesa una cuestión de fondo: el papel de los aficionados -en especial padres y madres- e ídolos en la educación deportiva de los más jóvenes. La actitud en las gradas tiene un impacto directo en la conducta de dichos jugadores, así como en su percepción del respeto y en los comportamientos hacia el estamento arbitral.
Suscríbete para seguir leyendo
- Primeras palabras de Fernando Alonso tras la pérdida, un comunicado en redes: 'Descansa en paz, hermano
- Alfonso, Miguel y Beatriz: los tres estudiantes con las mejores notas de Selectividad en Córdoba
- Fallece María Reina Obono Angono, ingeniera técnica agroalimentaria y exalumna de la Universidad de Córdoba
- La diputada socialista Desirée Benavides desvela que lleva años sufriendo malos tratos de su marido
- Esta es la única catedral española donde hay enterrado un papa y solo está a una hora y media de Córdoba
- Selectividad en Córdoba: menos aprobados y peor nota media este 2025
- Consulta aquí las notas de la Selectividad 2025 en Córdoba
- Xuso Jones entrega en Córdoba el premio récord de ‘Lo sabe, no lo sabe’