Caso Negreira

La fiscalía denunciará al Barcelona por corrupción continuada en el deporte por el caso Negreira

La acusación se dirigirá contra el exdirigente arbitral y el expresidente del club Josep Maria Bartomeu, entre otros directivos

Una vista del Camp Nou.

Una vista del Camp Nou. / Reuters

J. G. Albalat

La Fiscalía de Barcelona denunciará al Fútbol Club Barcelona como persona jurídica de corrupción continuada en los negocios por los pagos millonarios al exdirigente arbitral José María Enríquez Negreiira, según las fuentes consultadas por El Periódico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica. En la misma denuncia, que será presentada en esta semana en los juzgados, se incluye a Negreira, que era vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), al expresidente del Barça Josep Maria Bartomeu al exdirector ejecutivo Oscar Grau y a otro alto cargo del club. Respecto a estos últimos, introduce el delito de administración desleal. La denuncia en la que se recogerán los indicios está ultimada y solo falta el preceptivo visado por parte de la cúpula de la fiscalía.

La investigación de la fiscalía comenzó en mayo del 2022 (se prorrogaron el pasado mes de octubre) por unas presuntas irregularidades fiscales cometidas por la empresa de Negreira (Dasnil 95 SL) y tras una comunicación por parte de la Agencia TributariaLa querella interpuesta por un árbitro del VAR ante los juzgados marcará el futuro de esta denuncia, aunque todavía no está admitida a trámite. Esta querella, de Xavier Estrada Fernández, ha ido a parar al Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona que previsiblemente se hará cargo también de la denuncia de la fiscalía.

El delito de corrupción en los negocios castiga al directivo, administrador, empleado o colaborador de una empresa que, "por sí o por persona interpuesta, reciba, solicite o acepte un beneficio o ventaja no justificados" u "ofrecimiento o promesa de obtenerlo". La pena prevista es de seis meses a cuatro años de prisión, inhabilitación y multa. La misma condena se puede interponer a quien "prometa, ofrezca o conceda a directivos" un beneficio o "ventaja no justificados".

Este precepto del Código Penal es aplicable a ejecutivos de una entidad deportiva, así como a los deportistas y árbitros o jueces en conductas cuya finalidad sea predeterminar o alterar "de manera deliberada y fraudulenta el resultado de una prueba, encuentro o competición" de "especial relevancia económica o deportiva". La administración desleal (supone perjuicio económico a la entidad) tiene una pena de seis meses a tres años de cárcel.

La "neutralidad"

La investigación se centra en los 1,4 millones pagados por el Barça entre 2016 y 2018. Corresponden a los años en que Josep Maria Bartomeu era presidente, pero estos pagos empezaron presuntamente en el 2001 y fueron mantenidos por todos los dirigentes desde entonces hasta que en el 2018 el propio Bartomeu cortó el gasto. Las pesquisas se han acotado a esa época porque los desembolsos anteriores (en total suman siete millones de euros) no se pueden rastrear al haber el delito ya prescrito. Enríquez Negreira ocupó su cargo de responsabilidad arbitral del 2004 al 2018 precisamente.

Las alarmas tributarias se dispararon al declarar Enríquez Negreira ante los inspectores de Hacienda que no había documentación de los servicios de la empresa porque su trabajo consistía en asesorar verbalmente al club azulgrana. Enríquez Negreira era el propietario de Dasnil 95 y su hijo, Javier Enríquez Romero, era el administrador, y este refutó a su padre al asegurar que sí entregaba informes concretos a los responsables del club.

Defensa de Laporta

En su declaración ante la Agencia Tributaria, el exdirigente arbitral dijo que el club le pagaba porque querían "neutralidad". Cuando fue llamado a declarar como investigado ante la fiscalía, sin embargo, se acogió a su derecho. El club azulgrana desembolsó a Dasnil 95 SL 532.728,02 euros en 2016, 541.752 euros en 2017 y 318.200 euros en 2018. En junio de 2018, el Barcelona pagó la última factura, fecha que coincide con la salida de Enríquez Negreira del Comité.

Este martes, el presidente del Barça Joan Laporta se ha defendido con contundencia de las acusaciones vertidas sobre el club por el caso Negreira. "El Barça nunca ha comprado árbitros. Ni ha querido influir. Lo digo rotundamente. Nunca. El Barça no saldrá perjudicado de este caso. En todo caso es víctima", ha declarado en el Círculo Ecuestre. Ha prometido una rueda de prensa próximamente para dar explicaciones sobre el caso. Sin complejos, ha declarado que la anuló para la cita del Círculo Ecuestre, que coincidía con el segundo aniversario de su triunfo electoral.