Piqué se ha despedido por sorpresa de la afición culé en esta decimotercera jornada de LaLiga Santander con una victoria ante el Almería. La sesión dominical se vio marcada por el atasco de los aspirantes europeos con el empate a uno del Atlético de Madrid, Betis y Real Sociedad ante Espanyol, Sevilla y Valencia, respectivamente, y con la derrota del Villarreal ante el Mallorca (0-2). Los de Xavi mantienen el liderato tras el descalabro del Madrid ante el Rayo y el Barça se aleja por dos puntos del club merengue.

El pinchazo en Cádiz y la eliminación europea del Atlético de Madrid tuvo su continuidad en el Metropolitano ante el Espanyol, que jugó más de una hora en inferioridad por expulsión del uruguayo Leandro Cabrera. El conjunto de Diego Pablo Simeone, falto de acierto y confianza, no supo sacar partido. Este empate y los demás resultados permiten al Atlético mantener la tercera plaza, empatado con el Betis y con un punto más que Osasuna y Real Sociedad.

El vibrante derbi hispalense, marcado por tres rojas de VAR, al final dejó un sabor de boca agridulce en ambas escuadras. Los béticos se las prometieron felices un tramo y los sevillistas, que necesitó de un auténtico golazo del serbio Nemanja Gudelj para sacar un punto, no se aprovecharon de que su rival jugó casi todo el segundo tiempo con nueve pero las tablas le sirven para salir del descenso. La Real Sociedad encadenó su tercer partido sin ganar. También cedió un empate a uno, en su caso ante el Valencia, lo que le deja en la última plaza europea, la sexta.

Un autogol de Hugo Guillamón a los diez minutos alimentó las esperanzas del conjunto donostiarra en el Reale Arena, pero su comienzo quedó dinamitado por otra roja de VAR. Aritz Elustondo vio la roja siete minutos después por un pisotón al brasileño Samuel Lino, que no tardó en establecer la igualada (m.25). Las aguas bajan revueltas en el Villarreal. No conoce la victoria desde la llegada al banquillo de Quique Setién, relevo de Unai Emery, que se marchó al Aston Villa. Este domingo sucumbió ante un eficaz Mallorca (0-2). La afición villarrealense comenzó a mostrar de forma palpable su disgusto con Setién (incluso pidió su marcha), quien aseguró que entiende el enfado del público por los resultados y el juego, pero pidió paciencia. El cuadro castellonense está ya a cinco puntos de las plazas europeas.

Girona - Athletic (1-0)

El Girona puso fin este viernes a una racha de siete partidos sin ganar con una brillante victoria ante el Athletic Club (2-1), en un partido en el que fue muy superior y se impuso con dianas de David López e Iván Martín en la segunda mitad para seguir fuera de descenso.

El conjunto de Ernesto Valverde había retomado la senda del triunfo ante el Villarreal (1-0), pero volvió a mostrar una cara muy gris en Montilivi ante un Girona de Míchel Sánchez que se sitúa duodécimo.

Barça - Almería (2-0)

El último baile de Gerard Piqué en el Spotify Camp Nou terminó con una más que notable versión del Barcelona, el club de su vida, frente al Almería, en un partido en el que el resultado (2-0) quedó eclipsado por el homenaje que el coliseo azulgrana dedicó a una de sus leyendas más carismáticas. 

Ni el notable partido de Ferran Torres ni la resistencia almeriense en el primer tiempo. Tampoco Lewandowski, que erró un penalti en el primer tiempo, ni los goles que anotaron en la segunda parte Ousmane Dembélé y Frenkie De Jong. Todas las miradas estuvieron puestas en Piqué, que el jueves anunció por sorpresa su retirada como futbolista profesional. 

Celta de Vigo - Osasuna (1-2)

El argentino Chimy Ávila amargó el debut del portugués Carlos Carvalhal como entrenador del Celta de Vigo con dos golazos en el primer tiempo que dieron mucha tranquilidad al Osasuna, que supo aguantar en el segundo con las líneas juntas hasta que Aitor Fernández evitó el empate en el último suspiro con una espectacular parada a Gonçalo Paciencia.

La puesta en escena del nuevo Celta de Carvalhal fue muy buena. El técnico portugués dio continuidad al bloque que venía utilizando Eduardo Coudet, pero el equipo celeste jugó con otra marcha. Fue mucho más directo, con Carles Pérez en la banda derecha. Ni el golazo de Chimy Ávila, tras un monumental desajuste defensivo de Javi Galán en el lateral izquierdo, abatió al Celta.

Getafe - Cádiz (0-0)

El Getafe y el Cádiz libraron una batalla estéril en el Coliseum Alfonso Pérez (0-0), donde ninguno de los dos equipos pudo sumar los tres puntos en un duelo en el que la inspiración de David Soria salvó al conjunto madrileño una jornada más con dos intervenciones clave.

Como frente al Elche hace apenas unos días, Soria volvió a sacar su calidad a flote para rescatar al Getafe. Si en el Martínez Valero detuvo un penalti clave a Lucas Boyé, frente al Cádiz sufrieron sus reflejos Rubén Sobrino y Lucas Pérez, a quienes sacó dos manos clave en el último cuarto.

Real Valladolid - Elche (2-1)

El Real Valladolid se reencontró este sábado con la victoria, tras caer en El Sadar ante Osasuna, al imponerse al Elche por 2-1 en un duelo en el que un gran Edgar Badía impidió una goleada local y se convirtió en una muralla difícil de superar.

Ambas escuadras salieron con ganas. De hecho, el Elche trató de sorprender de inicio buscando el área local con valentía, aunque fue Plata el que pudo inaugurar el marcador a los 26 segundos, si bien su disparo terminó desviado por Edgar Badía cuando el público del José Zorrilla ya cantaba el gol.

Atlético de Madrid - Espanyol (1-1)

Los días de partido han cambiado para el aficionado del Atlético. La magia del Calderón se diluyó con el paso a un Metropolitano 'cinco estrellas' donde Simeone, su doctrina y sus pupilos han perdido el brillo y el ingenio. Es la peor temporada del ciclo mítico del Cholo como comandante rojiblanco tras salirse del fútbol europeo y resignarse al bronce nacional o a ser aspirante en la Copa del Rey.

No hay equipo que más desee el parón del Mundial que el equipo rojiblanco, incapaz de ganar a un Espanyol que jugó con 10 jugadores más de una hora después de la expulsión de Cabrera. Los de Diego Martínez llegaron a ponerse por delante en un marcador con un gol de Darder que solo pudo enmendar Joao Félix, más titular que los que iniciaron un nuevo desastre 'atlético'. Ni siquiera la tercera plaza de LaLiga parece asegurada.

Real Betis - Sevilla (1-1)

El Sevilla no pudo conseguir la victoria en el derbi ante el Betis disputado en el estadio Benito Villamarín, que acabó con empate a uno y con tres expulsiones, dos en la primera parte, una para cada equipo, y otra local en los inicios de la segunda, circunstancia que no aprovecharon los visitantes pese a que el serbio Nemanja Gudelj casi lo hace en el tramo final con dos ocasiones de un intenso choque.  

El partido fue el habitual en los derbis hispalenses, al límite, y ello propició las expulsiones y las alternativas con un primer tanto bético, en propia meta de Jesús Navas al borde del descanso, y la réplica de Gudelj en el minuto 81.

Real Sociedad - Valencia (1-1)

Real Sociedad y Valencia firmaron tablas (1-1) en un encuentro que el equipo donostiarra jugó con diez futbolistas desde el minuto 16 por la expulsión de Aritz Elustondo a instancias del VAR.

Para entonces, los de Imanol Alguacil ya se habían adelantado en el marcador tras un autogol de Guillamón que trataron de defender hasta el final y sumaron un punto valioso ante un Valencia que dejó pasar una buena oportunidad de sumar tres.

Villarreal - Mallorca (0-2)

El Real Mallorca se llevó los tres puntos en juego ante el Villarreal en el Ciutat de València (0-2) en un partido en el que de nada le sirvió al equipo local su mayor posesión de balón y domino territorial ante un rival bien asentado en defensa y que aprovechó sus opciones arriba.

Un gol del delantero kosovar Vedat Muriqi en la primera parte y otro de bella factura del senegalés Amath Ndiaye en la segunda parte dieron una justa victoria a un Mallorca que apenas pasó apuros ante un Villarreal inoperante en ataque.

Rayo Vallecano - Real Madrid (3-2)

Llegaba el Madrid a Vallecas el día que Brasil daba la lista para QatarDiez de los once titulares blancos estarán en el Mundial y la cabeza ya la tienen allí. De eso quiso sacar rédito un Rayo afilado en el despliegue y proponiendo un duelo incómodo de pierna dura. Justo lo que no le interesaba a los internacionales madridistas en el último compromiso antes de irse con sus selecciones. Decía Ancelotti que "los jugadores no piensan en el Mundial", algo que se caía por su peso viendo a Benzema y su "fatiga muscular" en casa. 

Si a esa propuesta le sumas un gol a los cuatro minutos con una llegada de Comesaña al corazón del área, donde Tchouaméni no apareció para barrer, obtienes un partido cuesta arriba. Pudo poner la puntilla Álvaro García, pero Courtois, al que le da igual que haya Mundial o fiesta en Ibiza, hizo su trabajo. En cada robo del Rayo se plantaban como aviones en el visitante. Los vallecanos cazaban en manada, como los lobos, y Modric no tenía socios con los que asociarse. Pudo Isi abrir más brecha con un latigazo que Courtois se sacó de encima como pudo. Se le atragantaba el duelo al Madrid