El Pozoalbense va a depender de sí mismo en las dos últimas jornadas de liga para lograr la salvación. Nadie lo diría hace mes y medio. El equipo pozoalbense venía de cuatro victorias consecutivas, pero no pudo lograr la quinta en un partido ante el líder, el Alhama.

El encuentro arrancó con el Pozoalbense haciendo el pasillo de campeón a las murcianas ya que tras el empate del Cacereño la liga era suya. Los aficionados murcianos aplaudieron ese inicio de partido, en el que las pozoalbenses se sintieron más cómodas. Más asentadas y con más control en el centro del campo. También tuvieron las primeras ocasiones. Ale fue la primera en lanzar un aviso. Por banda rompían las locales. Marilén fue la segunda en llegar. Pero nada, el balón no quería portería. 

El equipo murciano estaba más metido en su fiesta de ser campeón que en el partido. En otro descuido, Marilén pudo marcar. La falta de puntería y el acierto de la guardameta Laura hicieron que se llegara a la pausa de hidratación con un dominio aplastante en el juego de las locales. El cuerpo técnico del Alhama metió en el duelo a sus jugadoras y sería Andrea Carid quien pondría a prueba a Fati

Tras el paso por vestuarios, el juego se tranquilizó. Mucho balón en el medio y poco fútbol. Nora tirando de casta por su banda llegó al marco pimentonero. Hasta en dos ocasiones pudo marcar. También Ransanz. La única ocasión visitante la tendría el Alhama El Pozo por mediación de Quiles. No se movería el marcador. Empate a cero. El Alhama campeón y el Pozoalbense que se juega la vida la semana que viene ante el Tenerife. La salvación es posible.