El séptuple campeón del mundo inglés Lewis Hamilton (Mercedes) saldrá primero este domingo en el Gran Premio de Hungría, el undécimo del Mundial de Fórmula Uno, que se disputa en el Hungaroring, donde su equipo copará la primera fila y el holandés Max Verstappen (Red Bull), líder del Mundial -con ocho puntos sobre el británico- arrancará tercero, al lado de su compañero mexicano Sergio Pérez.

Hamilton, de 36 años, dominó, golpe psicológico final incluido, una calificación en la que elevó a 101 su propio récord histórico de 'poles' en la F1. Cubrió los 4.318 metros de la pista húngara en un minuto, 15 segundos y 419 milésimas, 315 menos que su compañero finlandés Valtteri Bottas; mientras que el holandés Max Verstappen intentará evitar desde la tercera plaza de parrilla que el astro inglés recupere el liderato que le cedió hace dos meses y seis carreras, en Mónaco.

El español Fernando Alonso (Alpine) , doble campeón del mundo (2005 y 2006), saldrá noveno en la última prueba antes del parón vacacional; que su compatriota Carlos Sainz, eliminado en la segunda ronda de la calificación (Q2) tras accidentarse con su Ferrari, afrontará desde la decimoquinta plaza.

Hamilton reclama el bastón de mando. Con el que el año pasado firmó un séptimo título que lo igualó al alemán Michael Schumacher; y que convirtió a Mercedes en la primera escudería de la historia en ganar siete veces seguidas el Mundial de constructores.

El espectacular y excéntrico campeón del Stevenage lo hizo de nuevo de forma categórica, volando con su 'flecha de plata' sobre la cálida y ventosa pista húngara. En la que al final casi se burló de sus rivales, ralentizando el ritmo antes del último infructuoso intento de todos. En un circuito en el que este domingo no sólo puede ampliar a cien su plusmarca histórica de victorias en la categoría reina, sino que, además, podría convertirse en el primero de todos los tiempos en ganar nueve veces el mismo Gran Premio (Schumacher ganó en Francia ocho veces: las mismas que él en Gran Bretaña y en el Hungaroring).

Vestappen, de 23 años, que, antes de que Hamilton le recortase 25 puntos al ganar ante su público en Silverstone, había festejado en Austria su quinta victoria del año, había sido el más rápido en el primer entrenamiento del viernes, por delante de los Mercedes. Luego se invirtieron las tornas y las 'flechas de plata' encabezaron, con Bottas al frente, la tabla de tiempos de la primera jornada del Gran Premio, por delante del líder del Mundial.

La joven estrella neerlandesa se quedó a 88 milésimas de Hamilton en el tercer y último ensayo, en la sesión matinal de este sábado, en la que Bottas, a dos décimas, fue tercero. Con Sainz cuarto, a seis décimas; Pérez, séptimo, a un segundo; y Alonso -que el jueves festejó su 40 cumpleaños en la pista en la que capturó la primera de sus 32 victorias en F1, hace 18 temporadas- noveno: a un segundo y una décima del inglés.

Bandera roja durante los entrenamientos

El entrenamiento estuvo interrumpido durante unos minutos con bandera roja, para retirar de pista el Haas del alemán Mick Schumacher, hijo del anteriormente citado Michael; que, por fortuna, no sufrió daños personales.

El hijo del 'Kaiser' no salió en la cronometrada principal, en cuya primera ronda quedó fuera el inglés George Russell (Williams), que en las diez primeras pruebas de esta temporada había evitado siempre ese trance. A pesar de pilotar el que, sobre el papel, es el segundo peor coche de la parrilla.

Verstappen había marcado el giro rápido de la primera ronda, mejorado en 210 milésimas a Hamilton. Y repitió vuelta rápida en la Q2, con siete décimas sobre el inglés Lando Norris (McLaren), la gran revelación de la temporada y, con 21 años, tercero en el Mundial: con 113 puntos, 72 menos que él.

En esa ronda quedó eliminado Sainz, que por la noche había cambiado la unidad de potencia de su Ferrari -algo que no implicaba sanción, al ser la tercera-. El madrileño se accidentó en la última de las 14 curvas -sin mayores consecuencias físicas- y provocó la interrupción durante unos minutos, de nuevo con bandera roja, de la Q2.

Mercedes fue la única con diferente estrategia en esa ronda, que Hamilton y Bottas acabaron con el sexto y el octavo parcial. A diferencia del resto de los que pasaron a la Q3 -que lo hizo con blandos-, los pilotos de la escudería de Brackley lo hicieron con neumáticos medios. Con los que tomarán la salida este domingo.

Después de que Verstappen dominase las dos primeras rondas, Hamilton entonó el 'basta ya'. Él y Bottas dejaron resueltas las dos primeras plazas en el primer intento de la Q3. Y en el tramo final de la cronometrada principal, 'Sir' Lewis recuperó la guerra psicológica -la verbal había sido el jueves- que se percibió durante algunas fases de los entrenamientos libres del viernes.

En esta ocasión, ralentizó todo lo que pudo el desenlace, hasta el punto de que 'Checo' -quinto en el Mundial, a 81 puntos de su capitán- se quedó sin poder efectuar un segundo intento; en el que 'Mad Max' apenas mejoró una décima para pasar de estar a medio segundo a ubicarse a cuatro décimas. Firmó su 'pole' 101 y no se inmutó con los abucheos que le dedicaron los numerosos seguidores holandeses presentes en las gradas del Hungaroring.

Alonso, que se lamentó de "la inconsistencia de los neumáticos" pero se marchó "contento", había acabado sexto la Q2, pero se conformará con salir noveno este domingo en el circuito en el que logró su primera victoria. En una jornada de 2003 en la que maravilló al mundo convirtiéndose, en ese momento, en el más joven ganador de la historia de la F1. Después de doblar al padre de Mick.