El récord mundial femenino de peso en pista cubierta, el más viejo del atletismo, cumple este viernes 44 años en poder de la checoslovaca Helena Fibingerova con un lanzamiento de 22,50 metros en Jablonec.

El 19 de febrero de 1977, en el Streinici Hall de Jablonec nad Nisou, al norte de la República Checa (entonces Checoslovaquia), Fibingerova ejecutó el único lanzamiento de la historia por encima de los 22,15 metros.

La asombrosa marca va camino de cumplir medio siglo, ya que ninguna mujer, desde que empezó el nuevo milenio, ha podido superar la barrera de los 21 metros.

Nacida el 13 de julio de 1949 en Vicemerice, Fibingerova, con una estatura de 1,79 metros y un peso de 88 kilos como atleta en activo, sacó una ventaja de casi cinco metros a la segunda clasificada, su compatriota Zdenka Bartonova (17,80) y seis a la tercera, la polaca Beate Habrzyk (16,50)

A lo largo de su carrera batió tres veces el récord mundial al aire libre: 21,57 el 21 de septiembre de 1974 en Gottwaldov, 21,99 el 26 de julio de 1976 en Opava y 22,32 el 20 de agosto de 1977 en Nitra. Este último permaneció imbatido hasta que el 2 de mayo de 1980 la alemana oriental Ilona Slupianek lo mejoró en cuatro centímetros.

Nadie ha podido arrebatarle, sin embargo, el récord del mundo en pista cubierta.

Por encima de aquellos 22,50 metros solo existe un lanzamiento: el récord mundial al aire libre que la soviética Natalya Lisovskaya logró con una marca de 22,63 el 7 de junio de 1987 en Moscú.

Fibingerova fue la primera campeona del mundo oficial, en Helsinki 1983 con una marca de 21,05 metros, por delante de las alemanas Helma Knorscheidt (20,70) e Ilona Schoknecht-Slupianek (20,56).

También fue olímpica. En Múnich-72 se clasificó séptima con 18,81 y en Montreal-76 consiguió la medalla de bronce con 20,67.