Llegaba el colista al Municipal y todo el mundo se preparó para una fiesta y el disfrute. El Pozoblanco venía de maravillar, haciéndole cuatro goles al Utrera y se atisbaba un nuevo triunfo. Se sabía que La Palma llegaba con el agua al cuello. Pero nada salió como el Pozoblanco creía, y eso que amaneció el partido con su dominio. Salió mandando. No obstante no había llegadas. No filtraba el último pase.

Los onubenses sobrevivieron y con el paso de los minutos se fueron soltando. El partido entró en una fase en la que no había nada. Ni un desmarque, ni un desborde. Nada. Centros lejanos, colgados, frontales y sin peligro. El Pozoblanco solo dispuso de una media ocasión en la primera parte. Se la concedió el rival en un fallo que David España no aprovechó. La Palma también tuvo una relativa ocasión en una cabalgada de Aguilar que no pasó a mayores. Se llegó al descanso con mal fútbol y dos equipos que no eran creadores de nada. Ninguno enamoraba aunque el día invitaba a ello por ser 14 de febrero con el sol en todo alto y un campo en perfecto estado.

En el segundo período el guión siguió igual. El Pozoblanco no supo imponer su superioridad por calidad de plantilla. Poco a poco La Palma empezó a darse cuenta de la situación y creyó que podía sacar algo más. El equipo de Fajardo estaba de los nervios y no hilvanaba una jugada.

Era un partido demasiado plácido en el que La Palma empezó a engrandecerse con la figura de Álvaro, que en el mediocampo hacía lo que le venía en gana. Y empezaron a llegar ocasiones tímidas. Todo esto hasta que Mario Rodríguez sacó a Galleti, del que dicen muchos, salvando las distancias, que es el nuevo Pardeza del condado palmeño. Salió el pequeñín y con su fútbol gamberro revolucionó el partido. Intervenía en todas las ocasiones de su equipo con regates, centros, pases. Cruzado y el mismo Galleti tuvieron el 0-1 en sus botas. Se veía venir que el gol caería. Un centro de Paco colgado en la banda encontró la cabeza de Cruzado, quien marcó a placer tras ganarle en el salto el sitio a la zaga vallesana. Fue lo que le faltaba al Pozoblanco, que ya de por sí estaba completamente desquiciado.

Ventaja y paso atrás

Tras el gol, los onubenses se echaron atrás y cedieron la pelota. Dieron varios pasos atrás y el Pozoblanco por inercia se le echó encima. A la desesperada. Sin embargo, los ataques de los locales eran caóticos. Colgaban y esperaban el fallo del rival sin pintar jugada alguna. Pudo empatar en una triple ocasión pero se encontró que la raya de la portería estaba llena de piernas y cabezas para sacar un balón que no entró.

El partido terminó cuando Galleti cogió un balón que iba a golpear a portería desde su propio campo pues el portero vallesano ya se había ido a rematar un córner. Pitó el colegiado y la sorpresa se confirmó con los jugadores de La Palma cantando y bailando tras conseguir tres puntos de oro en el Municipal. Nadie lo esperaba.

Ficha técnica

0 -Pozoblanco: Dela, Cancelo, Rafa, Santacruz, Luis Fraiz (Ángel García, m. 69), Joel (Mori, m. 84), León (Adri, m. 74), Migue Sánchez (Valentín, m, 69), Carlos Moreno (Zara, m. 46), Brian y David España.

1 -La Palma: Juan Corrales, Diego Domínguez, Paco, Alberto, Carlos Martínez (Pirri, m. 84), Juan Aguilar, Iraola, Álvaro (Segura, m. 84), Pablo (Galleti, m. 58), CMazin (Calle, m. 74) y Cruzado.

Árbitro: Rodríguez Caparrós, de Granada. Amarilla a los locales Migue Sánchez y Luis Fraiz; y a los visitantes Mazin, Pablo, Alberto, Carlos Martínez y al entrenador Mario Rodríguez.

Gol: 0-1, m. 71: Cruzado.

Incidencias: Partido correspondientea la decimosexta jornada de liga del subgrupo B de la Tercera División disputado en el Polideportivo Municipal de Pozoblanco a puerta cerrada.