El Córdoba CF ha empezado este martes a expedir las invitaciones para el encuentro del próximo domingo, en El Arcángel, ante el Lorca Deportiva (18.00 horas), en el que será el primer partido de la Liga 20-21.

Las taquillas del estadio municipal se han abierto pocos minutos después de las 09.00 horas y, aunque no se han formado colas de espera, con la correspondiente distancia de seguridad marcada en el suelo y por las vallas, sí que el goteo ha sido constante durante la mañana, afluencia que ha ido en aumento progresivamente durante el día y, conforme terminaba la jornada laboral de muchos aficionados, las taquillas de El Arcángel han registrado colas de casi 200 abonados en algún momento.

A primera hora del día, alrededor de medio centenar de abonados habían pasado ya por las dependencias de El Arcángel para recoger sus invitaciones para el domingo y las opiniones eran variadas: desde la duda de que se pueda celebrar el encuentro con todos los abonados en sus asientos, hasta la convicción de que las autoridades permitirán finalmente que los aficionados blanquiverdes estén con su equipo y poniendo como ejemplo el último encuentro amistoso del equipo de Sabas, en Badajoz, en donde asistieron alrededor de 4.500 aficionados.

Entre estos últimos estaba Rubén, abonado 9.074, que tiene su asiento en fondo norte "y es donde me lo han dado, porque no hay nadie al lado", aunque reconoce que "no me gusta esto, pero hay que adaptarse", mostrándose convencido no solo de que al final permitirán la asistencia a los abonados, sino que además "permitirán cantar el himno". Tras comentar que "ya nos informarán por redes sociales y la prensa" del horario de asistencia, el aficionado cordobesista comentaba en tono jocoso que "pareceremos detenidos cuando vengamos" debido al control que se mantendrá en todo el estadio, desde su acceso. Juan, abonado 8.974, admitía que la situación se le hace "muy rara, muy rara", pero entiende que "había que ser solidario con el club, a pesar de los pocos partidos que habrá o que se verán", por lo que había que apoyar "con dinero". "Llevo el folleto, que me explica todo lo que tengo que hacer, y la declaración para firmar", explicaba, pero advertía de que él tiene "tiempo libre para todo esto, pero otros no lo tienen tanto y lo verán como incomodidades".

Por su parte, Domingo, abonado 1.306 sonreía con sus invitaciones en la mano y explicaba que "con esto del covid, es lo que hay", pero se mostraba convencido de que "guardando las distancias y respetándonos todos, a nosotros mismos" las autoridades permitirán el acceso a todos los abonados, el próximo domingo. "Si la RFEF da permiso para el 30% entramos todos", argumentaba, insistiendo en que debían permitir el acceso a los aficionados y que estos "respeten las indicaciones y se respeten entre ellos". En cualquier caso, admitía que "habrá gente a favor y en contra, como en todo", aunque él ve la posibilidad de que haya aficionados como una decisión "razonable".

Finalmente, Francisco, abonado 3.991 no se mostraba nada de acuerdo con la posibilidad de que haya sorteo para el acceso. En caso de que las autoridades no permitan la entrada de los más de 6.000 abonados cordobesistas, Francisco entiende que "debían entrar de 800 en 800. Si limitan a 800 el número de espectadores, deberían entrar, según su opinión "del 1 al 800 y, al siguiente partido, del 801 al 1.600", ya que de esta manera "se garantiza que todos acudamos al menos a un encuentro". En caso de sorteo puro "pueden entrar algunos a dos o tres partidos y otros encontrarse con que no ha nvisto ninguno", se quejaba. En todo caso, el abonado cordobesista remarcaba que "los dirigentes no tienen la culpa, sino la RFEF, porque ahora ha venido esta gente -en referencia a los nuevos propietarios-, a los que hay que apoyar y habrá que ayudarlos, porque por su esfuerzo sigue habiendo fútbol en Córdoba, aunque el abono está subido de precio un poco", comentaba con media sonrisa. Además, Francisco explicaba que había que tener paciencia, porque "todo no puede salir bordado desde primera hora".