Las expectativas eran altas y el equipo estuvo a la algura. El Deza Ismabon Racing Team inició el ESBK, denominación del Campeonato de España de Velocidad, con un puñado de buenas carreras a pesar de tener que superar algunos problemas técnicos en el Circuito de Navarra.

En la categoría de SBK Junior, Ángel Heredia protagonizó dos grandes remontadas. El piloto mostró un buen ritmo desde la sesión del jueves, pero el viernes rompió motor y tuvo algunos problemas con el que se montó. No pudo clasificar delante y eso le privó de poder luchar por las primeras plazas en la primera carrera. A pesar de los contratiempos realizó una gran remontada, pero no pudo pasar de duodécima plaza tras salir el vigésimo. El domingo sí pudo lograr remontar 14 posiciones y colocarse sexto y tercero en la Ninja Spirit. Su gran actuación le reporta una gran inyección de moral para la siguiente prueba en el Circuito de Montmeló.

Guillem Erill, que debutaba en Supersport 600, tuvo problemas tanto en el motor como en la puesta a punto. Alcanzó la novena plaza en la primera carrera y la décima en la segunda, tras dos grandes remontadas. Lastrado por una mala posición en la parrilla, la semana que viene tendrá un gran estímulo en su casa, Montmeló. Allí trabajará para obtener una buena posición de salida para poder seguir progresando con la única Kawasaki de la parrilla.

Fran Alonso comenzó el año como acabó el anterior, puntuando en ambas mangas. El tinerfeño, con algún problema físico por una caída entrenando, pudo conseguir la 12º y 13º posición en las dos carreras celebradas. Las condiciones fueron duras y el piloto de la Kawasaki ZX10R pudo solventarlas con clase.

Sin tiempo para descansar, la estructura irá directamente a la siguiente cita, que tendrá lugar en el Circuito de Montmeló, sede de la segunda prueba del ESBK, donde quieren seguir progresando.