Camila Bonazzola prolongará un curso más su estancia en La Fuensanta defendiendo el escudo del Adesal. La internacional argentina renueva por una temporada para potenciar el extremo izquierdo del equipo cordobés en la máxima categoría femenina del balonmano español.

Nacida el 25 de mayo de 1996 en Buenos Aires, Bonazzola ya conoce la Liga Guerreras Iberdrola tras su paso por el Mavi La Calzada de Gijón. Con anterioridad estuvo en equipos de la máxima categoría de su país, donde es un puntal en la demarcación de extremo izquierdo y asidua en la selección nacional, conla que ha participado en los dos últimos mundiales de Alemania y Japón.

Bonazzola aterrizó en el Adesal el pasado mercado de invierno con el fin de reforzar al equipo en la segunda vuelta. La porteña ofreció un gran rendimiento y aportó su experiencia a nivel internacional. El reto actual es distinto, pero no menos exigente. "Ahora tenemos que conseguir la permanencia de categoría”, subraya la jugadora.

La extremo izquierda señala que van a ir "de menor a mayor en el sentido de que hay muchas que son debutantes en la Liga y han de agarrar confianza”. Debido a esta circunstancia, apunta que “va a ser muy importante el trabajo que se haga en la pretemporada”.

A Bonazzola le gusta el sistema de competición porque “están equilibrados los grupos y entiendo que habrá buena competencia”. Por ello, entiende que “va a ser entretenido”. Además, para la argentina hay otra motivación durante el curso, ya que Argentina tiene el derecho de participar en el Preolímpico de Lliria del mes de marzo de 2021, en el que también estarán los equipos nacionales de España, Senegal y Suecia.

El Adesal, que seguirá a las órdenes del técnico Rafa Moreno, ha realizado los fichajes de Fanny Monrós y Andrea Roda, dos nuevas incorporaciones a un plantel en el que renovaron Camila Bonazzola, Maura Álvarez, Asun Batista, Malena Guerisoli, Gleinys Reyes, Irene García, Amanda Valero, Lucía Vacas, Alba González y Ángela Ruiz.