El futuro del Córdoba CF pasa por la cantera. Mirar hacia el producto casero es cuestión más de necesidad que de vocación. Si no puedes comprar tendrás que fabricar. ¿Cuántas veces se han escuchado esos mantras en la casa blanquiverde y su entorno? Y las que faltan. Con la entidad purgando penas en Segunda B después de doce años moviéndose en el mapa del fútbol profesional, el recurso de las promociones desde el filial cobra una nueva dimensión. El proceso busca impacto futbolístico -hacer debutar canteranos es una “medalla” para los técnicos- y económico, pues se logran piezas de bajo coste. Y, obviamente, queda el capítulo final: una vez puesto en el escaparate, el que destaca sale a la venta al mejor postor.

Destacar en el filial, tener la oportunidad (y aprovecharla) en el primer equipo y ser traspasado a un club de categoría superior. Esa es la cadena ideal. Para algunos tiene un anexo: regresar al cabo de los años como hijo pródigo. De todo ha habido en el último decenio en el club cordobesista, que ha pasado por tres categorías distintas manteniendo un sello. No es sencillo ser canterano en El Arcángel.

2009-11: LA IRRUPCIÓN DE FUENTES

El técnico granadino Lucas Alcaraz estuvo en el banquillo del Córdoba CF dos cursos completos entre 2009 y 2011. Un par de salvaciones tranquilas en una etapa convulsa. En su primera temporada hizo debutar a tres chicos del filial: Fuentes, Pascual y Toni Seoane. El lateral zurdo, con 19 años, disputó 26 partidos y se proyectó como un elemento de futuro. Titular durante tres campañas en el Córdoba, fue fichado por el Espanyol y posteriormente pasó por Osasuna completando cuatro cursos en Primera. En el Nottingham Forest sufrió una grave lesión que precipitó su retirada. Actualmente dirige una escuela de fútbol en el Colegio Cervantes Maristas.

Pascual, un centrocampista de Palma del Río, intervino en dos partidos y salió del club. Seoane, un mediocentro versátil, inició un periplo por Lucena, Jerez, Arandina, Amorebieta, Novelda y Formac Villarrubia. Esta temporada se enfrentó al Córdoba y volvió, diez años después, a El Arcángel.

En la segunda temporada de Lucas Alcaraz se estrenaron en el primer equipo blanquiverde José Manuel Fernández (8 partidos), Javi Hervás (1 partido), Fede Vico (1 partido) y Mane (5 partidos).

2011-12: EL PELOTAZO DE HERVÁS

Cambia la propiedad del club: llega Carlos González. Con él, Paco Jémez y Luna Eslava. Y un jugador se destapa: Javi Hervás. El centrocampista se luce en un equipo muy creativo y en apenas seis meses se formaliza su traspaso al Sevilla por 1’5 millones. El cordobés no cuajó en Nervión y pasó por Hércules, Sabadell, Mirandés y Mérida, además de por las ligas de Bosnia y Australia. Ahora juega en el Honka de Finlandia.

En el año de Paco Jémez tuvo un efímero paso por el equipo Ismael Bolívar (1 partido), que ahora forma parte del equipo de material del club. También tuvieron debut y despedida el delantero Javi López y el guardameta Coca.

Fede Vico en un partido con el Córdoba CF.

2012-15: FEDE VICO Y LOS CRUZ

Desde el filial se promocionaron al primer equipo casi más entrenadores que jugadores. Berges, Villa, Carrión... Los técnicos del filial tuvieron su oportunidad y tiraron del producto que conocían. Berges dio la alternativa a Fede Vico, que con 18 años intervino en 33 partidos y fue internacional con la sub-19 de España. Motivos suficientes para ser pieza codiciada: se lo llevó el Anderlecht por 1’6 millones. En el club belga no tuvo protagonismo y después de varias escalas (Córdoba, Albacete, Lugo) fichó por el Leganés, que lo traspasó al Granada, con el que ahora juega en Primera División.

Los hermanos Fran y Bernardo Cruz, referentes de la cantera, tuvieron protagonismo durante dos años intensos. Ambos estuvieron en el año del ascenso a Primera, pero después salieron de la entidad y enfocaron su carrera en otras latitudes. Fran, tras pasar por los campeonatos de Rumanía y Polonia, está en el Extremadura, en Segunda. Bernardo milita en el Granada, en Primera, que lo cedio al Numancia.

En el trienio 2012-2015, incluyendo la etapa fugaz en Primera División, se estrenaron tambien en el primer equipo procedentes del filial Javi Cabezas (2 partidos), Manu Miquel (2), Damián Petcoff (1), Rafa Gálvez (5 y 20 en la siguiente), Dani Espejo (3), Juan Guerra (2) y Sergio García (1).

2015-17: CANTERANOS ‘IMPORTADOS’

La política deportiva del Córdoba puso el foco en el reclutamiento de futbolistas jóvenes de otros clubes, en edad juvenil o recién salidos, al tiempo que las perlas de la cantera blanquiverde se marchaban a entidades más potentes.

Oltra, que estuvo temporada y media en el cargo, hizo debutar a varios jugadores del B. Carrión, cuando le sustituyó, incrementó la medida. Fueron los casos de Abel Moreno (13 partidos), Jonathan Bijimine (8), Moha Traoré (1), Esteve Monterde (7), Quiles (2), Mena (1) y Ortega (1). Aparecieron en el primer equipo Sebas Moyano y Javi Galán, un extremo que llegó desde el Badajoz y que terminó siendo traspasado al Huesca, de Primera, después de haberse hecho fijo (77 partidos hasta enero del 2019) y protagonizado una explosión como lateral zurdo. Sebas no llegó nunca a asentarse y se convirtió en carne de cesión permanente: estuvo el último curso en el Valencia Mestalla y el Lugo tiene una opción para ficharle.

Javi Galán, en un partido con el Córdoba CF.

2018-20: ANDRESITO AL RESCATE

Entre el campeonato de la salvación milagrosa (18-19), el del descenso ganado a pulso (19-20) y el actual, interrumpido por la crisis del covid-19, el Córdoba ha hecho caja con sus canteranos y anda en busca de relevos en tiempos difíciles.

No fueron muchos los estrenos. En un año con Carrión, Merino, Romero y Sandoval al frente, el Córdoba hizo debutar en el primer equipo a Víctor Mena (2 partidos), Waldo Rubio (2), Javi Soler (1) y Álvaro Aguado (16). Este último, que llegó procedente del Jaén, fue un salvavidas económico después de que el año siguiente (25 partidos más) fuera traspasado al Valladolid en un pack junto a Sergi Guardiola por unos 5 millones de euros.

En la campaña 18-19, con la dirección de Sandoval, Curro Torres y Rafa Navarro en momentos a cada cual más turbio, debutaron en el primer equipo Marcos Lavín (10 partidos), Alberto González (1), Chuma (3), Antonio Moyano (2) y Andrés Martín. Los 29 partidos y 6 goles del delantero de Aguadulce le valieron para ser traspasado al Rayo Vallecano de Paco Jémez por 2 millones.

El pontanés José Antonio González, que tras pasar por el filial blanquiverde fichó por el Granada, ha debutado con el primer equipo de manera retardada como cedido por el club nazarí. El extremo de Santaella Vera y el centrocampista Fran Gómez, natural de Pozoblanco, tuvieron participación en la última temporada en Segunda B.

El porvenir está marcado por el cambio. El filial salvó el cuello en el grupo 10 de Tercera Division por la anulación de los descensos. El Córdoba empleó en su último partido antes del parón obligado el once titular con una edad media más alta de su historia. El equipo B y el A han coexistido tapándose carencias el uno al otro. Los nuevos jefes quieren hacer una conexión más natural y eficiente, tanto en lo futbolístico como en lo económico.