No lo tiene fácil el Córdoba CF Córdoba CFpara mejorar la plantilla para la próxima temporada. Tanto por el número de efectivos como en la propia configuración del plantel de la campaña que acaba de finalizar, los movimientos del nuevo organigrama deportivo de la entidad blanquiverde tendrá que hacer muchos equilibrios para transformar el vestuario respetando el máximo número de contratos en vigor -que no todos- y, a la vez, mejorar la competitividad del conjunto blanquiverde para la próxima campaña, en la que se volverá a tener el objetivo ineludible del regreso al fútbol profesional.

La nómina de jugadores sub-23 será importante, con hasta cinco incorporaciones, la mitad aproximadamente de las caras nuevas que han de llegar a El Arcángel, así como el filial cordobesista. La idea ha de ir combinada con la necesidad de mejorar la defensa, en donde tanto en los laterales como en el centro se necesitarán fichajes para mejorar uno de los puntos flacos del Córdoba en la campaña que acaba de finalizar. Además, el equipo de Juan Sabas necesitará de extremos, otro punto del que ha adolecido el conjunto blanquiverde en el último año, por lo que todos estos condicionantes señalan en una dirección: la delantera apenas experimentará variaciones o mejoras sustanciales.

Posiblemente, el juego de ataque de este Córdoba CF tenga que mejorar tanto por los costados como por los centrocampistas de ataque que de los que pueda disponer. También, con algún tipo de jugador polivalente, que pueda actuar tanto en la banda como de segundo delantero, pero el grueso del peso de ataque, la responsabilidad goleadora recaerá en dos hombres que ya están en la casa y que tienen contrato en vigor: Willy Ledesma y Federico Piovaccari.

Tanto el de Torremejía como el italiano apenas han podido demostrar su poder realizador en la 2019/20, ya que ambos llegaron en el mercado invernal de fichajes. De hecho, el transalpino lo hizo en el último minuto del mismo, por lo que apenas tuvieron un mes y medio para poder aportar algo al equipo. El extremeño, además, sufrió una lesión en el partido disputado en el Nuevo Vivero que le mantuvo alejado de los terrenos de juego durante varias jornadas, por lo que solo estuvo 218 minutos sobre un terreno de juego con la elástica blanquiverde. Justo cuando ya se había recuperado de su lesión llegó el parón liguero, primero, y la finalizazión de la temporada, después.

El caso de Piovaccari ha sido distinto. En su tercera etapa en el Córdoba CF, el transalpino jugó como titular y apurando los 90 minutos en los seis partidos que hubo entre su llegada y la finalización de la temporada. Pero no pudo ver puerta. A pesar de tener alguna ocasión en algún que otro choque, lo cierto es que Piovaccari no logró estrenarse en su mejor faceta y en ello influyeron varios factores. Cierto que erró alguna opción clara para anotar, pero también hubo no pocos momentos en esos 540 minutos disputados en los que estuvo completamente desasistido.

En cualquier caso, Willy y Piovaccari conformarán la pareja en la que el Córdoba CF debe depositar todas sus esperanzas para la próxima campaña. Una pareja que aún no se ha estrenado de cara al gol pero que ha mostrado en el pasado su capacidad anotadora. Para ello, el nuevo organigrama deportivo deberá centrarse en la búsqueda de jugadores de último pase y extremos, posiblemente, de corte clásico. Habrá que abastecer de balones a Willy Ledesma y Federico Piovaccari que, ahora mismo, son la esperanza del Córdoba CF.