Después del partido entre el PSG y el Dijon de la Copa de Francia, Neymar se negó a entrenar por las declaraciones que había dado su entrenador, Thomas Tuchel, en las que aseguraba que el jugador todavía no estaba al 100% para jugar el partido contra el Borussia Dortmund, según una información que publica el diario 'L'Équipe'.

El jugador ya estaba recuperado de su lesión de costillas cuando Tuchel ofreció estas declaraciones, algo que ofendió mucho a Neymar y que le llevó a tomar la decisión de no asistir al entrenamiento del día siguiente para así "descansar". "Es difícil quedarse cuatro partidos sin jugar.

Desafortunadamente no fue mi elección, fue algo del club, de los médicos, ellos fueron los que tomaron esta decisión. No me gustó. Tuvimos muchas discusiones sobre esto. Quería jugar, me sentía bien, pero el club tenía miedo, y fui yo quien sufrió al final", explicó el brasileño.