El mundo del patinaje francés vive una auténtica sacudida tras las revelaciones de antiguas deportistas sobre las agresiones sexuales de algunos de sus preparadores físicos cuando eran menores.

El libro de la ex campeona de patinaje artístico Sarah Abitbol ‘Un largo silencio’ y medios como L’Équipe han sacado a la luz violaciones y excesos en una Federación que ignoró los abusos y cuyo máximo responsable, Didier Gailhaguet, todavía está pensando si debe dimitir, como le ha pedido este lunes la ministra de Deportes y antigua campeona de natación, Roxana Maracineanu.

Violada a los 15 años

En este contexto, la Fiscalía de París ha decidido abrir diligencias este martes por los cargos de violación de menores. Más allá de los hechos narrados en el libro de Abitbol -que denuncia haber sido violada a los 15 años por su antiguo entrenador, Gilles Beyer- el ministerio fiscal quiere identificar a todas las personas que podrían haber sufrido los mismos daños, según ha explicado el fiscal de París, Rémy Heitz.

Abitbol se ha mostrado “contenta y aliviada” por la reacción de la Fiscalía porque , a su juicio, haber roto el silencio comienza a dar sus frutos. “Estoy verdaderamente contenta”, ha dicho en BFMTV. También ha criticado la actitud del presidente de la Federación de Deportes de Hielo. “Hubo gente que se quejó. Es imposible que no le haya llegado lo que pasaba”, abundó.

Todos estaban al corriente

También el antiguo campeón olímpico Gwendal Peizerat ha hablado de una verdadera omertà en las instancias dirigentes respecto a la violencia sexual y psicológica de las jóvenes atletas. “Todos estaban al corriente del lado desviado de Gilles Beyer”, ha dicho en la emisora RTL.

La titular de Deportes de la época, Marie Georges Buffet, al frente del Departamento entre 1997 y 2002, apartó al controvertido entrenador de la dirección de la federación a raíz de unas denuncias por agresión sexual pero su actual presidente, Didier Gailhaguet, lo volvió a integrar para sorpresa de todos.

Entre 1990 y 1992

Sarah Abitbol revela en su libro que Gilles Beyer la agredió sexualmente entre 1990 y 1992, cuando ella tenía entre 15 y 17 años. Otra patinadora, Hélène Godard, tenía entre 13 y 15 años cuando el mismo entrenador la violó a finales de los 70. Aunque los hechos hayan prescrito, nada impide que la justicia investigue el comportamiento de Gilles Beyer en un periodo más reciente.

“Corresponde a la justicia decir si los hechos han prescrito, pero visto el alcance de todos los casos conocidos y de todas las denuncias que se presentarán, creo que la justicia tendrá trabajo”, ha reaccionado la ministra Maracineanu.

Por su parte, Beyer ha admitido que mantuvo “relaciones íntimas e inapropiadas” con Abitbol y ha pedido disculpas, pero ha negado la visión de los hechos de la patinadora.