El Barça ha sometido este domingo al Real Madrid (83-63) al que atrapa en lo alto de la clasificación de la ACB, gracias sobre todo a una exhibición defensiva en el primer cuarto, en el que ha dejado al conjunto blanco en solo 5 puntos. El Madrid ha sido por momentos un muñeco en manos del equipo azulgrana y, aunque ha tirado de orgullo para reaccionar (llegó a ponerse a 7), no ha encontrado argumentos ofensivos para remontar ante un equipo solidario en defensa, con muchas más soluciones en ataque y sobre todo con ganas de resarcirse tras las dos derrotas en los dos últimos clásicos y la arenga de las ratas del médico madridista.

El inicio de partido hizo pensar en un triunfo cómodo del Barça, majestuoso en defensa en el primer cuarto. Los azulgranas abrieron el partido con un 8-0 y no dejaron anotar al Madrid hasta que habían transcurrido cuatro minutos y medio. El Madrid fue un festival de pérdidas y de triples fallados (anotó 1 de 10 en el primer cuarto), pero esas cifras solo se explican con la excelsa defensa del conjunto local, con continuas ayudas, que dejó a los blancos en cinco puntos en el primer acto y un marcador escandaloso (22-5).

Al Madrid se le hacía el aro pequeño mientras el Barça lo veía como una piscina. Oriola, Hanga y Kuric anotaron consecutivamente de tres para establecer la máxima diferencia de 21 puntos (35-14). El duelo entró entonces en una fase embarullada de la que le iba a costar salir, y en la que el Madrid se supo mover mejor. Un parcial de 0-8 y una técnica a Pesic, que protestó una de las muchas faltas en ataque señaladas permitió a los blancos, que dominaron el rebote ofensivo, irse vivos al descanso (39-27).

"Cuando pierdes 14 balones en un tiempo es muy difícil competir. Eso se ha juntado con nuestro porcentaje de tiro malísimo, pero al final nos hemos podido ir agarrando y competir", dijo Laso camino de los vestuarios. "Hemos tenido una buena defensa, hemos hecho un esfuerzo extra contra Campazzo y Laprovittola, a ver si lo podemos repetir porque sabemos que tienen mucho talento en ataque. Si podemos jugar en defensa como en los primeros 20 minutos podremos controlar partido y ganarlo", analizó Pesic.

Las cosas empezaron mal para el Barça en el tercer cuarto, con un Tavares imponiendo por fin su físico. Una antideportiva a Mirotic y un mate del caboverdiano dieron pie al momento más delicado para los azulgranas, que vieron su ventaja reducida a 7 puntos (41-34). Sin embargo, en el intercambio de golpes (literal) y de faltas en ataque el Barça encontró su momento para volver a ensanchar la brecha con un triple de Mirotic en una jugada en la que se lesionó Gabriel Deck, el último recurso que había empleado Laso para frenarle. El arreón final volvió a disparar al Barça, que a falta de 10 minutos ganaba por 17 (62-45).

No se rindió el Madrid, que con un parcial de salida de 6-0 redujo la diferencia a 11, pero nunca llegaría a bajar de la decena. Un triple de Kuric y un 2-1 de Oriola al contragolpe dejaron el triunfo visto para sentencia con 5 minutos por jugar (71-55). La victoria no le batsaba a unos jugadore shipermotivados, que lucharon hasta el final para obtener la mayor renta posible, para deleite de un Palau enfervorizado y en el que, como en el Wizink Center, demasiadas veces se oyeron insultos al rival.

FC Barcelona - Real Madrid (83-63)

Barça (22+17+23+21): Hanga (10), Higgins (7), Claver (-), Mirotic (20), Davies (5) -cinco inicial-, Tomic (8), Abrines (2), Delaney (14), Oriola (7) y Kuric (10).

Real Madrid (5+22+18+18): Campazzo (4), Deck (2), Taylor (4), Randolph (7), Tavares (8) -cinco inicial-, Rudy Fernández (3), Laprovittola (4), Thompkins (13), Causeur (4), Garuba (5) y Carroll (9).

Árbitros: Daniel Herrezuelo, Juan de Dios Oyón y Rafael Serrano. Eliminaron por cinco faltas personales a Garuba (min.35).

Incidencias: Partido de la decimoquinta jornada de la Liga Endesa, disputado en el Palau Blaugrana antes 7.387 espectadores.