Parecía imposible que la reconstrucción del Madrid pasara por recuperar para la causa a jugadores como Bale, en el centro del huracán; James, ya en vientos huracanados; o Isco, con una participación residual. Dos meses después, como era de esperar, Zidane se reencuentra constantemente con viejos problemas que van camino de explotar y él está en primera línea para recibir la metralla.

Bale sigue de baja, tras un mes sin entrenar con el Madrid, desde la última ventana de selecciones, cuando terminó con molestias el segundo partido con Gales. “El problema es que no está listo, no puede entrenar con normalidad. El jugador lo que quiere es estar bien, sufre el primero”, empezó diciendo Zidane, en una previa de un partido trascendente de Champions, en el que se juega buena parte de sus opciones de clasificación, y casi monopolizada por el galés.

CONVOCATORIA CON GALES

La sacudida informativa ha llegado con la convocatoria de la selección de Gales para los dos últimos partidos de la fase de clasificación para la Eurocopa, aún con posibilidades, que encabeza el atacante del Real Madrid. “No me molesta nada, su país tiene derecho a convocarlo. Ir, tiene que ir, luego veremos si está listo para jugar. Ahora mismo no está disponible, no sé lo que hablará con su seleccionador”, empezó diciendo el técnico, que acabó reconociendo que Bale puede estar con el combinado galés en la concentración del próximo lunes, tras un fin de semana en el que el Madrid viaja a Eibar y en el que parece que seguirá de baja.

La salida de Zidane fue tirar por la calle de en medio, obviando obstáculos: “Ya que aquí todo el mundo habla, voy a contar yo cosas a nuestra afición: El primero que sufre es el jugador, él quiere estar con nosotros, quiere jugar y estar con sus compañeros, esa es mi sensación. Nuestra afición tiene que pensar en positivo, es una tontería que digan que yo quiero que se vaya en enero, yo quiero que se quede con nosotros hasta el final de temporada. Esto lo veo muy claro”, dijo en su respuesta más larga, dirigiéndose directamente a la afición en varias ocasiones.

Ante la insistencia en la preguntas llegó, además de la reiteración en las respuestas, un cierto tono de ironía en un Zidane al que se le estaba haciendo larga tanta cuestión similar: “Tenemos buena relación, nos decimos buenos días todos los días”, llegó a decir entre las risas. “Hay que aguantar lo que se dice fuera”, concluyó.

LAS SIMILITUDES DEL CASO JAMES

En una situación similar se encuentra James, al que le han coincidido problemas físicos con pérdida de protagonismo en el equipo. La motivación que los medios afines al club resaltaban del colombiano a inicios de la temporada, se ha transformado en desidia y cercanía a las criticadas actitudes de Bale. “James es un poco lo mismo”, reconoció Zidane. “No está disponible, está con molestias e iremos viendo día a día. Ahora no te puedo contar lo que tiene”, dijo el técnico.

Entre tanto, el último empate del equipo de Zidane, en casa ante el Betis tras dos victorias, truncó el inicio de la primera dinámica positiva de los blancos en mucho tiempo, al menos de que el francés regresó al banquillo.

UNA FINAL ANTE EL GALATASARAY

Con los ánimos de nuevo alicaídos, con los comparecientes obligados a enviar mensajes de motivación y de superación, vuelve la Champions y la delicada situación de los blancos, con 4 puntos después de cuatro jornadas. La victoria en Turquía le dio un soplo de aire fresco, pero todo lo que no sea ganar en el Bernabéu ante el Galatasaray complicaría sobremanera las opciones de los de Zidane. “Podemos encarar el partido como una final, tenemos que ganar para pensar en pasar de fase”, reconoció Marcelo, el otro compareciente en la previa.

Marcelo (2i) gesticula ante sus compañeros en el entrenamiento de este martes del Madrid. / DAVID CASTRO (EL PERIÓDICO)

El brasileño, tras la salida de Reguilón y la llegada de Mendy por 50 millones de euros, ha recuperado los galones de titular que perdió con la marcha de Zidane, también algunas facetas de su juego positivas para el equipo. “Me encuentro mucho mejor que la temporada pasada, he trabajado para ello”, aseguró.

Ante el Galatasaray será titular, como otra media docena de compañeros que mantienen su estatus en el equipo desde hace al menos un lustro (Carvajal, Ramos, Varane, Casemiro, Kroos, Benzema…). Fede Valverde y Rodrygo son una rara avis, están casi solos y representan la esencia jóven del nuevo Madrid. Son el bastón que aguanta la vejez del equipo.