Saúl Craviotto, que junto a Carlos Arévalo, Marcus Cooper Walz y Rodrigo Germade ha logrado la medalla de plata en K4 500 y la clasificación para Tokio 2020, comentó que el cuarteto compitió "muy bien para la presión" a la que en su opinión estaban sometidos en esta final.

"Me siento muy muy orgulloso de mis tres compañeros. Cooper ha tenido un año complicado en tema de lesiones, con Arévalo llevamos sólo un mes montando y me siento muy orgulloso de lo que hemos hecho", declaró.

"Es la primera vez que me clasifico a la primera y estoy ahora mismo que no me lo creo. Yo ya he estado en tres Olimpiadas, tengo 34 años, llegaré con 35 y la gente joven sube fuerte... no quiero anunciar mi retirada pero huele a que puede ser mi última olimpiada y me gustaría cerrar una carrera deportiva brillante allí", dijo.

Carlos Arévalo se mostró igualmente satisfecho. "Ahora siento mucha rabia liberada y ganas de disfrutarlo. Ir a los Juegos es la ilusión de mi vida y ahora a luchar por hacerlo lo mejor posible".

Marcus Cooper calificó de "regatón" la carrera. "Estamos supercontentos, es una pasada. Esta plata nos sabe a oro después de una temporada un poco regular. El año que viene es año olímpico y vamos a apretar aún más porque hemos estado muy cerca de los alemanes incluso íbamos primeros una buena parte de la regata".

Los otros medallistas del turno matinal, el manchego Paco Cubelos y el vasco Iñigo Peña, plata en el K2 100, también se aseguraron plaza para Tokio y solo fueron superados por la embarcación alemana al mando de Max Hoff, multimedallista mundial y olímpico.