El caso Griezmann aumenta la tensión entre el Atlético de Madrid y el F. C. Barcelona. Tras las declaraciones de Josep Maria Bartomeu sobre la posible incorporación del jugador francés a las filas del Barça, el equipo madrileño ha cargado contra el presidente culé y ha obligado a Antoine Griezmann a presentarse este domingo para iniciar la pretemporada.

Durante la rueda de prensa de este viernes por la dimisión de su vicepresidente deportivo, Bartomeu ha revelado la primera reunión entre ambos equipos: se produjo en Madrid un encuentro entre Óscar Grau, el CEO del Barcelona, y Miguel Ángel Gil Marín, el consejero delegado del Atlético de Madrid. "Le dijimos si es posible negociar por Griezmann", ha comentado Bartomeu, abriendo así la posibilidad a fraccionar en plazos la cláusula de 120 millones de euros. "Es el primer contacto con el Atlético de Madrid para hablar de este tema".

El equipo madrileño no ha tardado en responder con un comunicado. El club ha reconocido que este encuentro se produjo, donde el "señor Grau manifestó su intención de, una vez haber sido modificada la cláusula de rescisión del contrato de Antoine Griezmann y haber pasado de 200 a 120 millones de euros, pedir un aplazamiento del pago del referido importe de la cláusula vigente a partir del 1 de julio", a lo que el Atlético dio una respuesta "negativa". El motivo es que consideran que "tanto el Fútbol Club Barcelona como el jugador han faltado al respeto al Atlético de Madrid y a todos sus aficionados" por haber negociado su futuro contrato con el Barcelona durante un mes antes de anunciar a los colchoneros su intención de irse.

A modo de castigo, el equipo madrileño ha requerido a Griezmann que, "en cumplimiento de sus obligaciones contractuales con nuestro club", se presente el próximo domingo para empezar la pretemporada con el resto de sus compañeros.