No hubo margen para la sorpresa. Abdelhadi El Mouaziz y Nazha Machrouh ampliaron su palmarés venciendo en la Media Ciudad de Lucena, sobre un exigente recorrido en un día espléndido para el atletismo popular. Los corredores de origen marroquí fueron los grandes dominadores.

En la categoría masculina, El Mouaziz quiso desde el pistoletazo de salida imponer un ritmo que alejara los fantasmas del pasado año, cuando un desfallecimiento a las puertas de las meta lo dejó sin la victoria. Ayer, el cuento sería bien distinto: un triunfo sin paliativos con un tiempo de 1:09:11. Por detrás del marroquí, el duelo por entrar en el podio de la carrera lucentina tuvo acento local hasta que Antonio Montero, segundo durante dos tercios de la carrera, tuvo que abandonar con problemas físicos. Laureano García y Cristóbal García, corredor afincando en Lucena, hicieron buenos los pronósticos parando el crono en 1:11:01 y 1:11:25, respectivamente.

En la categoría femenina, Lucena es una plaza inexpugnable para las rivales de Nazha Machrouh. La campeona fue fiel a su cita con el trazado lucentino y su exigente marcheta desde los primeros kilómetros, al ritmo de la música en directo en los diez conciertos que saludaron el paso de los corredores, fue suficiente para subir de nuevo a lo más alto del podio con una marca de 1:22:02. Solo Belén Jiménez, con 1:34:50 y Rosabel Pérez, con 1:35:08 pudieron poner algo de emoción.

El podio de ganadores lo completó Antonio Martínez en la categoría con personas con discapacidad, por delante del tándem formado por Manuel Garnica y Fernando Plaza. Tras los campeones, un rosario de corredores. Al final acabaron 875 corredores (778 hombres y 97 mujeres), nuevo récord de la prueba, superando los 734 del año anterior.

La carrera atravesó, literalmente, la historia de una Lucena milenaria al transitar los pasillos del Castillo del Moral, el Palacio de los Condes de Santa Ana, la plaza de toros o los exteriores escénicos del Auditorio Municipal.

El evento equiparó un año más los premios a los ganadores absolutos con los discapacitados.