La Liga más loca de los últimos tiempos se destapó este miércoles con un doble episodio insospechado. Abrió el cartel el Barça con un ridículo en Leganés (2-1). Jugaban el primero contra el último y el colista dejó de cerrar el campeonato humillando al campeón. El drama se atenuó poco después. El revolcón del Madrid en Sevilla (3-0) sirvió para rebajar las penas.

El equipo de Valverde sigue líder de la Liga aunque parezca surrealista. Con un punto de seis posibles ante el Girona y el Leganés, el Barça debe reflexionar. La imagen en Butarque fue horrorosa, comparable a la desidia e impotencia que ofreció en la trágica noche de Roma en la Champions. Este miércoles, con menos minutos en las piernas y ante un humilde adversario, se dejó remontar de forma incomprensible. "Ha sido un accidente. Cuesta explicar lo que ha pasado", resumió Ernesto Valverde.

Sin recursos

El técnico es el primer señalado de un nuevo fiasco. No acaba de encontrar la tecla correcta a la hora de rotar y todos sus retoques resultan nefastos. Cuando el extremeño se sale de su once de gala llegan los problemas. Alba y Suárez fueron los elegidos para descansar. Ambos entraron luego, como ocurrió con Coutinho y Rakitic ante el Girona. Esta falta de imaginación y recursos es preocupante y da fuerza a los críticos de Valverde. El Barça exige más frescura, intensidad y ambición.

No le va mucho mejor al Madrid. La visita al Pizjuán suele ser dura para los blancos (seis derrotas en los sietes últimos años), pero no hasta el punto de despedirse del partido en 40 minutos. El Sevilla arolló al equipo blanco con esa seriedad y dinamismo que caracterizan a los bloques de Pablo Machín, el gran triunfador de la última semana.

Pulso clave

Dos goles de André Silva y uno de Ben Yedder propiciaron la primera derrota de un Madrid que ya se había dejando dos puntos en San Mamés, el estadio donde el Athletic fue goleado este miércoles por el Villarreal (0-3) en otra muestra más de una Liga volcánica.

El doble ridículo de los grandes llevó la sonrisa al Atlético, que se sitúa a dos puntos de la cabeza en la semana del derbi. El Bernabéu acogerá el sábado un pulso que puede abrir la primera crisis en el Madrid si se repite el fiasco del Pizjuán. El Sevilla persigue al trío de favoritos, igualado con el Alavés, que recibe este jueves al Getafe, y el Espanyol, que abrirá este viernes en Vallecas la séptima jornada. La rueda no para.