Más de media hora estuvo hablando Sandoval en sala de prensa (posiblemente, un récord) y el 90% del tiempo lo hizo del límite salarial, del control económico, de la casi imposible operación de traspaso de Sergi Guardiola y de las enormes dificultades para inscribir a Pawel Kieszek y Edu Ramos. También lo hizo sobre los errores cometidos por el club, casi siempre apostillados con un «como ha reconocido el presidente» y sobre el más grande de ellos: la cesión y no traspaso de Guardiola, de la que refirió que «hubo otra persona que trató ese tema y se hizo en unas condiciones que ahora nos están perjudicando porque no tenemos recursos para ello. Con esa venta podríamos haber manejado muchas cosas para poder fichar». No nombró a Luis Oliver, quizás porque no hacía falta o puede que, simplemente, no quisiera hacerlo. El caso es que se centró en destacar que «ahora mismo lo tenemos todo en negro. ¿Edu Ramos? En negro total, no se puede inscribir. ¿Que estamos buscando alternativas? Sí». Además, se deshizo en reconocimiento y elogios -como hizo por la tarde el director deportivo, Rafa Berges, en la presentación oficial de Carlos Abad- hacia Pawel Kieszek y Edu Ramos. «Están teniendo un comportamiento increíble. Tenemos la suerte de tener esas grandes personas, porque hasta ahora lo único que han hecho ha sido sumar y sumar, dar facilidades al club, exponer su patrimonio, todo, porque incluso han bajado sus salarios para poder apuntarse, pero como previamente se ha hecho mal, pues no nos dejan». Enmarcó la llegada del portero tinerfeño, precisamente, «porque vemos muy negro lo de Pawel. ¿Qué pasa? Que no vamos a bajar los brazos, creemos que se puede luchar y en el poco periodo de tiempo que quede seguiremos luchando y trabajando, pero nos estamos poniendo en el peor de los casos». Al club blanquiverde le restan por inscribir una ficha profesional, ya que tiene 17 y el máximo que le ha permitido LaLiga es de 18 y, probablemente, dos más de sub 23. Todos los que lleguen, en cualquier caso, lo harán cobrando el mínimo interprofesional, o el «mínimo AFE», al que se refería ayer Sandoval, que también expuso un caso, como ejemplo, pero que en realidad le ha pasado a la entidad blanquiverde en los últimos días. «Si a mí me llega un jugador con el mínimo AFE y el año pasado cobraba 500.000 euros en otro club, me dicen que para atrás. Y están en su derecho», refiriéndose a las personas que rigen el control económico de LaLiga, con Javier Gómez a la cabeza. Ese caso, lejos de ser un botón de muestra, le ha pasado al Córdoba. Tenía un acuerdo con un futbolista de Primera División con esa ficha, pero con prioridad por jugar y LaLiga no aceptó su inscripción por lo que tuvo que ir a otro jugador con un contrato más bajo y que esa renuncia económica no tuviera ese escalón tan alto.

Sobre el caso Guardiola, Sandoval aseguró que «creo que lo que habéis publicado, cosas, todos estáis en lo cierto, porque no estáis tan mal encaminados. Si preguntáis a uno y a otro esto tiene una verdad, un camino: que cuando tú no puedes apuntar a alguien es por algo: porque te has pasado», aseveró el de Humanes.

También, como Berges, se deshizo en elogios hacia Carlos Abad, «un porterazo. Va a sustituir a san Pawel, por todo lo que ha dado, ha hecho dos salvaciones agónicas en el Córdoba y ha influido mucho en esas dos salvaciones. Y es bueno que haya competencia en la portería. ¿Que solucionamos lo de Pawel? Pues a competir los tres», remachó el técnico blanquiverde.

El director deportivo, Rafa Berges, reconoció por la tarde que le da «pena» la situación del portero y del centrocampista, ya que «es difícil encontrar a gente con esos valores humanos, al margen de su calidad» y remarcó como «inimaginable su grado de compromiso». Berges aseguró que «es un palo a nivel personal y de vestuario si no se inscriben».

El director deportivo admitió que «LaLiga nos puede poner trabas, tenemos a la gente que nos va a dar alas y, al final, vamos a competir», ya que «tenemos lo que otros no tienen, a nuestra afición, que es nuestra gran fortaleza», aunque, lógicamente, el club blanquiverde espera que «nos dejen inscribir a más jugadores, pese a que no deja hacerlo con cualquiera».

El debate con los problemas del límite alcanzó, de nuevo, hasta a la previa con el Oviedo.