El entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, se encuentra hoy de turismo en Córdoba, donde ha causado cierto revuelo allá por donde ha sido visto, entre otros sitios el Patio de los Naranjos, la Mezquita Catedral o el entorno del Ayuntamiento, junto al Templo Romano.

El técnico blanco ha almorzado con su mujer en un pequeño restaurante, prácticamente solos, en La Ribera. Fuera, enfrente del establecimiento, aguardaban una docena de jóvenes aficionados con los móviles preparados y con boligrafos para autógrafos.

El francés confirmó a este periódico que era "la primera vez que vengo a Córdoba" y se quedó, principalmente, con la Mezquita como el monumento que más le ha gustado. De hecho, afirmó que "me ha encantado".

Zidane ha atendido tanto a turistas como a curiosos. Foto: MIGUEL ÁNGEL SALAS

Tras el almuerzo, Zidane salió a la calle aunque siendo detenido, cada 50 metros, por turistas y cordobeses que le reconocían. El entrenador del Real Madrid no ha perdido la compostura y, siempre amable, ha atendido a todo el que le ha pedido autógrafos o fotografías. Siempre con una sonrisa. Aligerando el paso para dejar atrás tantas peticiones, también ha visitado la Calleja de las Flores.

Fotos: MIGUEL ÁNGEL SALAS

Zidane se ha paseado por la ciudad con gorra y gafas de sol para pasar todo lo desapercibido que puede hacerlo una celebridad del deporte como él, porque algunos viandantes lo han reconocido, lo han fotografiado, e incluso han colgado su imagen en las redes sociales.

Entre esas fotos que circulan por las redes está la de Zidane con varios empleados del hotel donde se aloja, o la de un sonriente Zidane con gorra y gafas de sol ante el Templo Romano, en la esquina de Claudio Marcelo con la calle Capitulares.