Dos penaltis prácticamente consecutivos acabaron con las aspiraciones del Córdoba B de asaltar el estadio de La Victoria de Jaén (2-0). El filial blanquiverde, que fue de menos a más en el primer tiempo, se vio sorprendido por dos rápidas acciones que desembocaron en lo que, a la postre, serían su losa en el encuentro de ayer. Santi Villa y Sergio Molina no fallaron desde el fatídico punto para tumbar a un cuadro cordobesista que no mereció tanto castigo en su visita a Jaén.

Arrancó el partido en La Victoria frío, muy frío. Con dos equipos que guardaban las distancias y tanteaban el terreno donde poder hacerle daño al rival. Tanto los de Ramón Tejada como los de Losada salieron con el freno de mano puesto, buscando su oportunidad para hacer daño. El césped del feudo ´lagarto´ tampoco para excesivas florituras, por lo que se vio un fútbol directo en los primeros compases que cerca estuvo de desembocar en el 1-0 cuando Santi Villa colgó un balón al área que Vitu no llegó a cazar. Esta acción permitió desperezarse a los jienenses que volvieron a la carga con un lanzamiento de Sergio Molina que Valera repelió en brillante estirada. Volvió a intervenir el arquero cordobesista en un cabezazo de Trujillo tras centro de Santi Villa. Empezaban los de la Capital del Santo Reino a merodear con peligro el área blanquiverde, aunque sin puntería. El Córdoba B trataba de desperezarse, pero la alta presión ejercida por su adversario le impedía salir de su parcela.

Antes de la media hora de juego volvió a intervenir Valera en una acción de Vitu. No fue hasta el 29´ cuando los de Losada se acercaron por primera vez por el área de Felipe Ramos con un lanzamiento de José Antonio González que se estrelló contra el lateral de la red. Iba de menos a más el filial pero el marcador permaneció inamovible al asueto, pese a que Moha la tuvo en el último suspiro.

Mucho más trabado fue el inicio del segundo tiempo, con numerosas interrupciones y cartulinas amarillas que frenaron el ritmo del partido. En una de esas faltas llegaría el penalti cometido por Pablo Vázquez que Santi Villa no desaprovechó para colocar el 1-0 en el electrónico de La Victoria. Y si un penalti era poco castigo, a los cinco minutos, otro. Sergio Molina batió a Valera desde los once metros para establecer el 2-0 y desquiciar por completo a los jóvenes cordobesistas. Intentó reaccionar el filial, que pudo recortar distancias en un testarazo de Fran Serrano tras un córner, pero ayer la puntería de los blanquiverdes no estaba igual de afinada que en otras ocasiones y el duelo se acabó decantando del bando local.