Fernando Alonso (McLaren) ya está en Baréin donde este fin de semana el segundo gran premio de la temporada después de que, hace quince días, en Melbourne (Australia), el alemán Nico Rosberg y Lewis Hamilton volvieran a dominar los entrenamientos y, por este orden, la carrera. Alonso, que sufrió un escalofriante accidente del que salió vivo de milagro, según los médicos de la propia Federación Internacional del Automóvil (FIA), ha confesado nada más pisar Baréin sus ganas por correr. “He descansado tal y como me recomendaron los médicos y tengo muchísimas ganas de volver a ponerme al volante de mi McLaren", aseguró el bicampeón mundial, que estrenará chasis y unidad de potencia en el circuito de Sakhir, ya que la escudería deWoking no ha conseguido reparar los enormes desperfectos tras el choque en Albert Park.

ENCANTADO CON BARÉIN

El asturiano explicó que antes del brutal accidente tuvo "algunas buenas batallas en pista y las sensaciones en el coche eran bastante prometedoras", por lo que confió en que "en Baréin vuelva a ser igual". "Me gusta de veras correr en Baréin, ha sido un buen circuito para mí; he ganado en tres ocasiones allí y cuenta con un buen número de oportunidades para adelantar", dijo. "Hay muchas variables a tener en cuenta y es una de las carreras más largas, lo que habitualmente produce espectáculo en pista. Esperamos poder disfrutar de buenas disputas sobre la pista y no tener problemas", apuntó Alonso.

AGRADECIMIENTO AL EQUIPO

Asimismo, Alonso destacó el esfuerzo masivo de los equipos enWoking (McLaren) y Sakura (Honda) “para asegurar que podamos volver a ser rápidos". "Estoy muy impresionado por la rapidez con la que han conseguido darle la vuelta a la situación".

Mientras el bicampeón asturiano se recuperaba de su vuelo sobre elHaas F-1 del mexicano Esteban Gutiérrez, la FIA abrió una investigación para analizar las causas del choque y todas sus consecuencias, después de detectar, según publicó en su día 'Motorsport' en su edición italiana, que el asiento del McLaren MP4-31 se rompió roto a la altura de los hombros del pilotos español.

ALONSO DESPEGÓ A 312 KMS/H.

Después de que Jules Bianchi se convirtiera, el pasado año, en el primer piloto fallecido en la F1 desde los tiempos de Ayton Senna, laFIA es más estricta aún en materia de seguridad. Alonso, nada más bajarse del coche, fue el primero en darles las gracias públicamente por el nivel de protección alcanzado.

Alonso se accidentó a 312 kilómetros por hora y tuvo que soportar 46G y 3.128 kilos de impacto. La micro cámara de Magneti Marellimontada en su coche grabó la secuencia completa con 400 frames por segundo lo que está permitiendo a la FIA investigar el accidente con todo lujo de detalles.