POSITIVO

Una reacción destacable

Verse con 2-0 en el marcador y con uno menos tras haberse jugado poco más de un cuarto de hora desmoraliza a más de un equipo, que normalmente se deja llevar por los nubarrones. En Elche, el Córdoba se agarró a la reacción individual de Florin Andone, todo carácter, para construir a partir de ahí un proyecto con el que poder competir el duelo. Y lo cierto es que los de Oltra lograron equilibrar la contienda y hasta de disfrutar de ocasiones. La entrega y el empuje del grupo fue una más de las que ha firmado el equipo bajo la tutela de Oltra que, ante la escasez de recursos, marcó el sacrificio como único camino al éxito.

Algo de balón al pie

Cierto que fueron relativamente pocos minutos, pero por una vez se pudo ver a este Córdoba intentar construir desde atrás y, sobre todo, en el mediocampo, en donde sobresalió Víctor Pérez. Por una vez, el manchego no sólo tuvo que destruir: también distribuyó juego y se incorporó en zonas del mediocampo rival. Cierto que el rival lo favorecía: Pelayo no tuvo su tarde, el Elche es un equipo que permite jugar y el Córdoba tenía que intentar equilibrar el marcador, pero hay que recordar que los de Oltra jugaban con uno menos. Fue su mayor mérito: no se notó la inferioridad gracias al balón.

NEGATIVO

Inferioridad manifiesta

Mal se haría si se adjudicaran los primeros 20 minutos del Córdoba a una simple caraja. El Elche le superó en casi todas las facetas del juego y lo hizo con fútbol, combinando. Al contrario de otros equipos --con mucho toque pero poca profundidad--, los de Baraja demostraron, a lomos de un destacado Espinosa, que además de jugar al fútbol saben hacer daño. De hecho, la única manera en la que el Córdoba pudo equilibrar el juego fue aumentando la posesión y buscando qué hacer con él. Tuvo que cambiar, a la fuerza, el chip de jornadas anteriores y casi le sale bien. Esa inferioridad sin balón debería estudiarse seriamente.

Oltra, sin opciones

¿Qué hubiera pasado en el tramo final, con el equipo fundido físicamente en caso de que Oltra hubiera dispuesto de un auténtico banquillo? Nunca se sabrá, pero lo cierto es que el Córdoba, en Elche, mereció tener más opciones que las que ofrecían, además de Falcón, Arturo --descartado en verano--, López Silva --sin protagonismo, una temporada más--, Dalmau --error de verano-- o Pineda --no ha cubierto las expectativas--. Se vio obligado a tirar de Pedro Ríos --petición expresa suya en verano--, del chileno --expulsado a los nueve minutos-- y de un jugador de Tercera, Bijimine.