Último compromiso del año 2015 para el Cajasur Córdoba Balonmano, que afronta un partido trampa en la pista toledana del Ciudad Imperial con la idea de seguir manteniendo la gran línea de resultados que lo han colocado como líder durante casi todo lo que se lleva disputado de la competición, a falta de sólo dos encuentros para llegar al final de la primera vuelta. Los cajistas tienen la oportunidad de cerrar el año sumando dos nuevos puntos ante un cuadro manchego que no lo pondrá nada fácil a buen seguro. El duelo se disputará el sábado a partir de las 18:00 horas en el Pabellón Santa Bárbara con arbitraje de la pareja castellano leonesa formada por Lázaro Villegas y Portugal Alonso.

Un 2015 productivo para el Cajasur, que acumula en el año natural un bagaje liguero, entre el final de la 2014-15 y el principio de la 2015-16, de quince victorias, dos empates y siete derrotas. La última data de la última jornada de la pasada campaña, allá por el mes de mayo.

Pase lo que pase en Toledo, los granates acabarán el año ostentando el liderato de su grupo, pero quieren más, mucho más. La posibilidad de marcharse a vacaciones con al menos seis puntos sobre el tercer clasificado debe ser un acicate suficiente como para salir a por todas en Toledo, a pesar de las múltiples lesiones que arrastrarán fruto de distintos inconvenientes acaecidos en las últimas semanas. Con cinco bajas de la primera plantilla, Escribano tirará de algún jugador del filial BM Maravillas para completar convocatoria, porque actualmente sólo tiene disponibles ocho jugadores de campo y tres porteros.

Son estas bajas las que hacen desconfiar del partido al técnico Jesús Escribano, quien señaló sobre el mismo que “nos lo planteamos como una prueba interesante ya que viajaremos con las bajas de Aitor, Dublino, Jota, Ruano, Padilla y el juvenil Pablo Martín. La plantilla es amplia pero sí es cierto que perdemos a tres titulares y nos tendremos que sobreponer a ello ante un Ciudad Imperial que jugará con la tranquilidad de estar más o menos cumpliendo sus expectativas a pesar de marchar en la zona baja ya que mantiene prácticamente el equipo que subió a Primera hace unos meses”.

Esas bajas provocarán cambios en el planteamiento del juego que se verán reflejados tanto en el aspecto defensivo como en el ofensivo. Escribano señaló que “nuestro objetivo es adaptarnos a la falta de esos jugadores, que además va para largo, con lo que nos queda, que no es poco. Debemos plantear el partido de manera distinta. La baja de Jota, Ruano y Pablo nos obliga a defender más abiertos y a intentar robar balones. Luego en ataque sin Aitor y Dublino perdemos lanzamiento exterior, lo que nos obliga a mover mejor el balón y buscar situaciones mejor de definición, especialmente por los extremos”.

El técnico granate sabe que, a pesar de la teórica diferencia de potencial entre ambas plantillas, el duelo en Toledo no será fácil, ya que “el Ciudad Imperial mantiene el bloque del ascenso, es cierto que no se han reforzado pero sí están acostumbrados a jugar juntos y se conocen bien. Tienen un plus de capacidad de sacrificio muy importante, sobre todo cuando juegan en su propio pabellón”.