Luis Enrique ha revolucionado al Barça para enfrentarse este domingo al Levante en la cuarta jornada de Liga. Para empezar, ha dado descanso a piezas intocables como Iniesta y Suárez, que habían sido fundamentales en el inicio de la temporada. Y, además, abre la puerta en el once inicial a Bartra, además de colar también a dos jóvenes que se estrenan como titulares: Munir y Sandro. O sea, sale el Barcelona con Ter Stegen en la portería, que también debuta este curso en el Camp Nou, con Alves, Bartra, Mascherano y Adriano en la defensa, Busquets, Munir, tal vez como interior, y Rakitic en el centro del campo, mientras Messi, Sandro y Neymar completan el ataque.
A no ser, claro, que Luis Enrique revolucione también la estructura técnica del equipo colocando una línea defensiva de tres jugadores dejando a Messi como media punta por detrás de Neymar, Sandro y Munir. Piensa el técnico no solo en ganar al Levante sino en dosificar esfuerzos de cara al duelo del miércoles en Balaídos ante el Celta, donde también recupera a Piqué, que cumple ante el Levante el cuarto partido de sanción por la roja que vio en la Supercopa de España.
