El Athletic Club pudo decidir ayer la eliminatoria ante el Nápoles en el campo de San Paolo, pero será San Mamés dentro de ocho días quien dicte sentencia de una eliminatoria previa a la Fase de Grupos de la Liga de Campeones que Iker Muniain puso en ventaja para los leones en la primera mitad y el argentino Gonzalo Higuaín equilibró en la segunda. El partido tuvo fases muy marcadas. Un inicio algo caótico del Athletic, dominio de los de Valverde a partir del primer cuarto de hora, control total rojiblanco hasta el 1-1 y asedio final, en que el conjunto vasco salió vivo de milagro.