El central brasileño Paulao, con dos errores clamorosos, uno dejando en bandeja un gol a Rochina y otro con un tanto en propia meta, se unió a la fiesta del Rayo, que se aseguró la permanencia al vencer cómodamente (3-1) a un Betis que quemó sus escasas opciones de salvación y ya es virtualmente equipo de Segunda. Con 37 puntos en la tabla y la moral por las nubes tras sumar 17 de los últimos 24 en juego, el Rayo afrontó el choque definitivo por la permanencia con una tranquilidad inaudita esta temporada y arropado de nuevo por su hinchada, que casi volvió a llenar Vallecas. Mientras, el Betis se termina de hundir en la tabla con 22 puntos.