Leo Messi juega como habla. O habla como juega. De manera directa, sin dar rodeos, con una contundencia inesperada, tanto en la defensa de su padre, cuestionado por el escándalo de los partidos benéficos, como a la hora de atacar a Javier Faus, el vicepresidente económico del Barcelona. "Lamento profundamente todo lo que se está diciendo, no solo hacia mí sino hacia personas que quiero como mi papá", ha empezado comentando la estrella argentina en una entrevista exclusiva a el programa 'El Mòn a Rac 1' de Jordi Basté. "Lo que hacemos nosotros en esos partidos es ciento por ciento benéfico", ha explicado Messi.

Pero no se ha quedado ahí el delantero, que sigue en Buenos Aires recuperándose de la lesión muscular que padeció hace cinco semanas. "Me resulta gracioso lo que se dice, estoy profundamente unido a mi papá, a mi familia en lo personal y en lo profesional", ha precisado Messi negando cualquier problema con su familia por todos estos asuntos. Ha ido incluso más allá. "Si de mi depende, y mientras él quiera, mi papá va a seguir siendo el presidente de nuestra empresa. Yo me dedico a jugar a fútbol y él gestiona mis intereses más allá del campo", ha dicho.

Después de esa defensa apasionada de Jorge Messi, el jugador del Barça ha centrado sus ataques en Javier Faus, el vicepresidente económico del club que había dicho que no entendía por qué se tenía que estar renovando a Messi cada seis meses. "El señor Faus es una persona que no sabe nada de fútbol, quiere manejar al Barcelona como si fuera una empresa. Y no lo es", ha soltado en una declaración sin precedentes en Messi. Nunca antes había sido tan duro con nadie, ni siquiera con un rival. No se ha detenido. "El Barcelona es uno de los mejores equipos del mundo y merece ser representado por los mejores. Le recuerdo --ha dicho en alusión a Faus-- que ni yo ni nadie de mi entorno hemos pedido nunca ningún aumento ni ninguna renovación. Él lo sabe muy bien".