El Córdoba B y el Lucena disputan hoy (12.00 horas) su primer derbi en la categoría de bronce, donde los celestes se han erguido en uno de los rivales más duros de este grupo IV gracias, en parte, a la llegada de la nueva junta directiva y al buen hacer de Rafael Carrillo. Y aunque el objetivo del club aracelitano es la permanencia, las dos temporadas consecutivas que lleva Falete metiendo a los suyos en la fase de promoción ha disparado las espectativas en el Ciudad de Lucena, que en lo que va de temporada ya ha aclamado y abucheado a su técnico.

Enfrente está un filial cordobesista que ha llegado tarde, muy tarde, a la competición. Si ya hubo de esperar hasta agosto para comprar el ascenso administrativo a Segunda División B, la planificación de la temporada, pensada para una categoría inferior, ha resultado ser mala y ahora el filial está terminando de despuntar gracias, especialmente, a la llegada del nuevo técnico, José Antonio Romero. El exresponsable del fútbol base del club blanquiverde logró en dos partidos los mismos puntos que hasta la jornada 9 llevaba el filial de Pepe Puche. Hace dos semanas los canteranos cordobesistas lograron su primera victoria en Segunda B.

REMONTADA Así llega el Córdoba B a este duelo, en plena remontada después de haber abandonado el farolillo rojo la semana pasada y con la moral totalmente reforzada. Los de Romero están a cinco puntos de salir de la zona de descenso. Aún queda mucha Liga y la pugna por la salvación se prevé dura, pero al menos el Córdoba B estará en esa pelea por la permanencia.

Esa es la idea con la que se espera la visita del Lucena. Romero está obligado a quebrarse la cabeza para componer el once. Pablo Villa convocó a cinco de sus jugadores para el duelo ante el Barcelona B. Bernardo jugó los 90 minutos con lo que, salvo sorpresa, descansará. Mendi disputó una parte entera, así que tampoco estará de inicio. Juan Guerra volvió a tener sus minutos así que, seguramente, no saldrá en el once.

Además, Dani Espejo sale de la enfermería tras tres semanas en el dique seco. Igualmente, se recuperan a Zafra y a González. Todos los efectivos de Romero están citados y no se sabrá hasta 90 minutos antes del duelo los que están convocados.

MOVILIZACIÓN LUCENTINISTA Se espera un amplio desplazamiento de seguidores celestes, puesto que las entradas costarán diez euros, como es habitual en los duelos del filial blanquiverde. Quienes no estarán presentes en el palco son los directivos de la junta gestora del Lucena, puesto que desgraciadamente siguen rotas las relaciones institucionales con el Córdoba desde el pasado verano debido a la negativa del presidente cordobesista, Carlos González, a ceder jugadores al conjunto de la Subbética en las dos últimas temporadas. Por ello, los dirigentes lucentinos pasarán por taquilla como cualquier otro aficionado para presenciar el encuentro entre estos dos equipos seis años después. La estadística de los derbis en Tercera es claramente favorable a los celestes, que ganaron en cinco ocasiones.

En el terreno deportivo, el Lucena necesita mejorar su rendimiento deportivo del mes de noviembre, en el que únicamente sumó cuatro puntos en casa por derrotas a domicilio en Albacete y Melilla. El técnico lucentinista dispone de los 18 jugadores de su plantilla, toda vez que ha recuperado al sancionado Obregón y al lateral izquierdo Clavero tras superar un esguince de rodilla, con lo que pondrá sobre la hierba artificial del municipal carpeño al mejor once posible. Las novedades van a estar centradas posiblemente en defensa y en la línea medular, toda vez que los exblanquiverdes Marcos y Clavero podrían ocupar los laterales en lugar de Sergio Rodríguez y Germán, mientras que el veterano Obregón será pareja de centrales con Santacruz. En el centro del campo es posible que Coco vuelva a la titularidad en lugar de Fran tras la espectacular segunda parte, que ofreció la pasada jornada frente al filial del Almería.

Será un encuentro especial para seis jugadores celestes, que militaron en las filas del Córdoba: Marcos, Clavero, Jesús Lanza, Sarmiento, Ismael y Pepe Díaz; al igual que Mane y Fran González, con pasado celeste.