Un Córdoba acuciado por las bajas en forma de lesiones y sanciones tiene una prueba de fuego el próximo sábado ante el filial azulgrana. Tal y como adelantó este periódico, la web del Córdoba confirmó ayer que Pelayo no estará disponible al menos durante las próximas cinco semanas, mientras que Xisco seguirá ausente 15 días. Sumadas a la dolencia de Strahman, que hasta febrero al menos no podrá jugar, Pablo Villa hace cábalas y baraja hacer regresar a Luso por delante de la defensa, aunque su acompañante sería Carlos Caballero, ya que el de Alcorcón duda en situar a Abel Gómez en la posición de mediapunta, en la que cuajó grandes actuaciones en el Granada o, sin ir más lejos, en la vuelta de Copa de la temporada pasada ante la Real Sociedad, en Anoeta, posiblemente el mejor encuentro realizado por el cordobesista desde que viste de blanco y verde. De esta manera, daría continuidad a Uli como avanzadilla en ataque y Pachecho mantendría la posición en la banda derecha.
Pero quizás el problema inmediato más acuciante sea en la línea de atrás, zona en la que el equipo de Villa ha perdido consistencia en las últimas cinco jornadas. No solo lo dicen las sensaciones en el campo, sobre todo lejos de casa, sino también los números. Paradójicamente, el hombre con mejores números cuando ha estado dentro del colectivo titular es el holandés Janse que salió de inicio en 10 ocasiones y el equipo recibió seis goles. En esos dos primeros tercios de las jornadas disputadas hasta ahora las apariciones de Saizar rozaban lo anecdótico. La zona defensiva se mostraba aceptablemente consistente y a pesar de algunos cambios obligados por lesión o sanción (Raúl Bravo y Bouzón), las entradas de Bernardo Cruz y Samuel apenas afectaron a los números del portero donostiarra para el Zamora de Segunda. En este último tercio los cambios afectaron al centro de la zaga, en la que entró Armando, desplazando a Bouzón y mandando a Janse al banquillo, y también a la medular, en la que Villa apostó por Abel y Caballero en detrimento de Luso, principal guardián de la pareja de centrales en esas primeras 10 jornadas ligueras, lo que a su vez propició un protagonismo sintomático de Saizar. Tal y como demuestra el gráfico adjunto los números les avalan y casi con total seguridad Janse y Bernardo formarán parte de la línea de defensa el sábado. Además, podrían volver a tener a Luso por delante de ellos. Lo que sea con tal de no ver a Saizar y olvidarlo. Volverá a ser una buena señal.
