En algo más de dos semanas, Diego Costa debutará como internacional absoluto con la selección española. El secretario general de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Jorge Pérez, ha adelantado que su convocatoria para los amistosos que La Roja disputará el día 15 contra Angola en Luanda y ante Sudáfrica en Johannesburgo es segura. No lo impedirá ni el hecho de que la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) se haya movilizado para que al delantero del Atlético le sea retirada la nacionalidad brasileña por parte del Ministerio de Justicia de aquel país.

La iniciativa de tomar tal represalia con el jugador fue conocida ayer poco después de que el propio Diego Costa explicase sus razones en la página web del Atlético. "Ha sido una decisión bastante complicada por tener que decidir entre un país en el que he nacido y otro que me lo ha dado todo, que es España. Lo miré, lo pensé mucho y lo correcto y lo mejor es jugar con España porque aquí he hecho todo lo que tengo en mi vida. Todo lo que tengo me lo ha dado este país", dijo el máximo goleador de la Liga (11 tantos), que acaba de cumplir 25 años y llegó hace siete al Atlético, donde ha triunfado finalmente tras jugar cedido en el Celta, Albacete, Valladolid y Rayo.

BUENA ACOGIDA Costa añadió que una de sus mayores preocupaciones es ser bien acogido por los internacionales españoles y así se lo hizo saber a Vicente del Bosque en la reunión que mantuvieron a principios de mes, antes de los últimos partidos de la fase de clasificación para el Mundial. "Una de las cosas que más me vienen a la cabeza es la importancia del grupo. Dije muy claro a las personas que hablaron conmigo y al entrenador que lo importante es el grupo. Si el grupo estaba de acuerdo, si cree que la decisión es correcta, yo encantado", señaló el delantero del Atlético.