El presidente del Córdoba CF, Carlos González, contestó ayer a la carta que le mandó Antonio Prieto el pasado 23 de enero, dirigida a la Junta General de Accionistas. En una misiva de algo más de tres folios, el máximo accionista muestra una reiterada "sorpresa" por varias de las acusaciones y actos llevados a cabo por el exvicepresidente del club.

En primer lugar, se muestra extrañado por la salida del propio Prieto de la entidad cordobesista. "A pesar de su manifestada condición de seguidor del Córdoba, (...) en lugar de continuar trabajando para tratar de ayudar al Córdoba a salir de la dificilísima situación económica (...), decidió dimitir como miembro del consejo de administración".

González también le muestra su asombro por que Prieto dijera que condicionaba su permanencia en el consejo "al cumplimiento por el actual accionista mayoritario de sus obligaciones asumidas frente al Grupo Prasa en virtud del contrato de compraventa", según escribe el presidente, y sin embargo no condicionara "su pertenencia a dicho consejo al cumplimiento de las obligaciones asumidas por el Grupo Prasa como anterior accionista".

DISPARIDAD "De hecho --continúa--, el informe de calificación presentado por la administración concursal acusa a los anteriores administradores de no haber reclamado nunca a Grupo Prasa las obligaciones de aportar fondos, que ésta había asumido". González solo encuentra un motivo a lo que considera una "sorprendente disparidad": "La especial vinculación que siempre ha mantenido (Prieto) con Grupo Prasa", lo que según él, le condujo a "incumplir gravemente su deber de lealtad como consejero del Córdoba". Por ello cree que "no está legitimado a realizar ningún reproche al actual consejo de administración".

El presidente blanquiverde manifiesta su "confianza" en su equipo gestor. "Después de muchos ejercicios sin conseguirlo, se ha obtenido un beneficio que ha permitido abandonar la situación de pérdidas en que el anterior equipo gestor tenía sumido al Córdoba (...), a pesar de los reiterados intentos que estamos sufriendo de desestabilizar el club".

Otro de los puntos versa sobre el hecho de que Prieto no firmara las cuentas porque los consejeros delegados no pusieron a su disposición toda la información que precisaba, según dice en la carta del 23 de enero. "Su respuesta ante tal supuesta falta de información nunca debió ser la ausencia de firma de las cuentas, sino la solicitud de la información necesaria para ello", le responde González. "Es obligación de todo administrador --añade-- el procurarse toda la información que precise para llevar a cabo su gestión".

El máximo mandatario cordobesista también aclara otra de las manifestaciones de la carta de Prieto, en relación con la no formulación de las cuentas dentro del plazo legal previsto. "Como permite la ley, el acuerdo de formulación se adoptaba por escrito y sin sesión. Para ello, se circulaban las cuentas a todos los consejeros y estos las devolvían firmadas".

El último punto al que contesta González es al incumplimiento que Prieto le imputa a Eccodocumática de sus obligaciones del contrato de compraventa. El presidente asegura que está "cumpliendo íntegramente con todas y cada una de las cláusulas". El presidente acusa a Prieto de un "deliberado intento de distraer la atención sobre lo verdaderamente relevante, la ruina económica" en que estaba el Córdoba a su llegada.

Este periódico se puso en contacto ayer para conocer la opinión de Antonio Prieto, que prefirió no pronunciarse sobre la carta recibida por parte de Carlos González y se remitió a la suya enviada el 23 de enero.