Hoy somos muchos los que echamos de menos las noticias-"bomba" de Campanero en la Feria, los sueños de Salinas y su Caja salvadora, la cercanía del recordado Enrique Orizaola, las confidencias con jugadores en los años de dura travesía por la Segunda B. Aunque el equipo estaba a años luz del actual en lo deportivo y en lo económico, el tradicional encuentro con los medios servía como paréntesis propicio para renovar los compromisos. Para limar el desgaste del día a día. No entiendo esa voluntad de algunos por aislarse, precisamente ahora, cuando toca hacer un mayor esfuerzo común.