El Mundial de F-1 comienza como un cara a cara entre McLaren y Red Bull, un duelo de dos equipos y cuatro pilotos. Ese es el esbozo que dibujó la carrera inaugural del GP de Australia, un duelo que se repetirá en la calificación de hoy (09.00 horas) y en la carrera de mañana (10.00 horas, Antena 3) en el caluroso Sepang. Jenson Button se anotó el triunfo en Albert Park y es el principal favorito para subir a lo más alto del podio en Malasia. El McLaren-Mercedes parece superior al Red Bull-Renault en este arranque, y Button gestiona mejor que su compañero Lewis Hamilton el desgaste de neumáticos. La calificación es otra cosa. A una vuelta, el agresivo Hamilton parece más rápido que Button. Este año, Red Bull no dispone del mágico mapa motor (prohibido por la FIA) para barrer en la Q-3. Ahora no solo están un paso por detrás de McLaren sino que pelean contra invitados como la poderosa Mercedes, especialmente veloz en la crono, pero con problemas de desgaste de neumáticos en carrera.

DECEPCIONADO CON F2012 Lotus también se encuentra en esa pelea, así que el papel de Ferrari, un paso más atrás, es intentar entrar en la Q-3 frente a los Williams, los Sauber o los Toro Rosso. "Sabemos en lo que tenemos que mejorar. En Maranello están trabajando todo lo rápido que pueden para evolucionar el coche", explica Stefano Domenicali, el primer "decepcionado" con el rendimiento del F2012.