"El coche es casi idéntico para todos al de Melbourne y sabemos los problemas que tenemos en el nuestro". Con esa frase comenzó Fernando Alonso a calcular sus posibilidades en el Gran Premio de Malasia este fin de semana. El coche será idéntico al de Australia y el de Malasia es un circuito con dos largas rectas, con curvas de alta velocidad, un trazado donde es casi imposible esconder las carencias del monoplaza. Y el F2012 tiene muchas, así que Alonso espera un fin de semana muy complicado. "No tengo una bola de cristal. En Australia pasaron cosas como el accidente de Grosjean en la vuelta 3, la salida de Michael (Schumacher) o que Kimi (Raikkonen) hiciera una mala crono, que nos ayudaron a conseguir un puesto por encima de lo que podíamos. En una carrera más normal podríamos haber acabado detrás y en una con lluvia o incidentes, más adelante. Nunca se sabe".

Ferrari prepara un nuevo chasis para estrenar en el GP de España, pero Alonso no quiere hablar de plazos. "No hay una carrera determinada. Vamos a llevar mejorar casi en cada carrera, pero no espero un momento determinado". El español salía así al paso de las informaciones que señalan la llegada de un coche con chasis y carrocería nuevos para Bahrain o Barcelona. Prefiere hablar de espíritu de equipo: "Espero una gran reacción del equipo.Estamos muy unidos. El ambiente es muy bueno y estamos trabajando día y noche para poder mejorar cuanto antes", dice el asturiano que lleva desde el lunes aclimatándose al fuerte calor y humedad de Kuala Lumpur.

La lluvia puede ser el mejor aliado de Ferrari en Malasia, dos años después de que esa lluvia dejara al aire sus problemas con la estrategia. Ese aspecto parece corregido, lo mismo que el tiempo de maniobra en los cambios de ruedas. Ahora están a la cabeza en los dos aspectos, pero el coche es una castaña, por eso una carrera con lluvia iría bien a los intereses de Ferrari. "Para ser honesto, no miro mucho la predicción meteorológica. Lo importante es reaccionar rápido y adecuadamente a los cambios. Lo único seguro es que hará calor, mucho calor", concluye el piloto después de cuatro días aclimatación en Kuala Lumpur con ejercicio físico en condiciones de calor y humedad, incluidos varios recorridos de golf, una de sus pasiones fuera de la F-1.

Homenaje a Simoncelli

"Obviamente, la meta siempre es ganar el Mundial. Este año estamos convencidos de que lucharemos por el título. Tenemos que seguir centrados y trabajar más que los demás, porque estamos algo por detrás. Pero sabemos que el campeonato es largo", ha señalado el bicampeón español. "Tenemos que estar tranquilos y concentrados, porque el equipo trabaja con determinación. Hay un gran ambiente, confío en todos, todos estamos muy unidos y nuestro momento llegará pronto", ha afirmado el campeón mundial del 2005 y el 2006, que antes de la conferencia de prensa homenajeó a Marco Simoncelli, el piloto italiano fallecido en este mismo trazado el pasado año. Nos hemos hecho una foto con Felipe (Massa) y otros miembros del equipo en la curva 11, donde sucedió el accidente, en memoria de él. Todos los italianos y en general toda la familia Ferrari nos acordaremos siempre de él", indicó

Muchos problemas para Massa

Cargar contra Lewis Hamilton, incluso le puede generar alguna simpatía, como tras cada accidente del año pasado, una temporada en la que no sumó ni un solo podio por 10 de su compañero, pero si Felipe Massa apunta a su propio equipo para explicar el segundo de diferencia por vuelta respecto a Fernando Alonso Australia, comienza a jugar con fuego. En Malasia estrenará coche con un chasis gemelo (el reserva por si hay accidentes) “para evitar cualquier tipo de dudas”, según explica una nota oficial de Ferrari en un tono seco.

El propio equipo dice que refuerza su confianza en Massa después de que el resultado de Australia le haya colocado en el “centro de las críticas”. El brasileño justificó su mala actuación ¿abandonó en carrera cuando ocupaba los últimas posiciones, y después de quedar decimosexto, a un segundo de Alonso, en la clasificación. "El coche derrapaba y la degradación era mucha mayor que la de todos los demás. No había nada que pudiera hacer".

Con el objetivo de solventar cualquier dudas sobre anomalías en el monoplaza que compitió en Melbourne, Ferrari ha construido montado otro coche sobre el chasis de reserva, el 294. "Se tomó esta decisión con tal de acabar con cualquier duda sobre el rendimiento del coche de Felipe en Australia".

Massa tiene claro que no estará el próximo año en Ferrari, pero la suda ahora es si el equipo le mantendrá esta temporada si persiste su bajo rendimiento. "Felipe sabe que cuenta con el apoyo de todo el equipo para que pueda volver a demostrar su talento", reza la nota de Ferrari, tras recordar que en “2008, cuando después de las dos primeras carreras tenía cero puntos en su casillero, muchos periodistas pidieron su despido, pero tuvieron que cambiar de opinión, ya que únicamente unas circunstancias especiales (el accidente de Budapest y el pit-stop de Singapur, entre otras) le privaron de ser Campeón del Mundo".