Por si alguien tenía alguna duda, Sebastian Vettel proclama a los cuatro vientos que no tiene otro objetivo que ser campeón del mundo y que, dado el potencial de su coche, se enfadaría bastante de no conseguirlo por tercera vez. Eso sí, aún quiere saber la distancia con los rivales, por eso aún no ha puesto adjetivo a su nuevo chasis, al que ha bautizado con el nombre de Abbey.

Tras Julie, Kate, Kate's dirty sister, Luscious Liz y Kinky Kylie, Abbey se une a la lista de nombres femeninos elegidos por el bicampeón para identificar los diferentes coches que ha pilotado en los pasados años. Aunque la tónica de temporadas pasadas ha sido unir un adjetivo picante al nombre escogido, Vettel ha señalado que, de momento, no hay ninguno pensado. "Todavía no. ¡Ya veremos, primero quiere comprobar cómo se comporta!", afirmaba el piloto de Red Bull. Sabe, eso sí, que será un buen coche, rápido, capaz de permitirle luchar por las victorias.

"Mi objetivo siempre es ganar el campeonato del mundo, y después de ganar el primer mundial es un gran alivio en muchos aspectos, ya que me he demostrado a mí mismo que puedo hacerlo, lo que es más importante que cualquier otra cosa", mantiene el bicampeón del mundo.

"En suma, es un gran alivio, pero eso no quiere decir que sirva demasiado de cara al futuro inmediato. Sabes que todo vuelve a empezar, todo el mundo empieza de cero otra vez y quieres volver a hacerlo de forma natural". "Así que ser campeón del mundo de nuevo es lo que quiero", añadió el bicampeón alemán en su comparecencia en Melbourne (Australia). "Por eso estoy aquí, nada ha cambiado, sigo con la misma hambre, y me enfadaré si no lo consigo", comentó el lider de Red Bull, que, estando preparado para perder "porque eso siempre puede ocurrir en el deporte", no duda de sus posibilidades.

¿Favoritos?

Vettel no cree que sean tan favoritos o que vuelvan a dominar el campeonato como en años anteriores. "No creo que todo este ya decidido, me parece increible que alguien piense así. Uno nunca sabe qué va a pasar. Sería muy aburrido si lo supiéramos. Creo que la mitad de las personas que han venido a Melbourne no hubieran hecho este largo viaje si supieran lo que va a suceder. Y, además, aún es más difícil hacer predicciones este año, porque parece que la distancia entre los equipos es muy pequeña y podría haber sorpresas como puede ser la de Lotus".

Ni que decir tiene que Vettel no se fia de los rumores que llegan de Ferrari que indican que aún no tienen un coche ganador. "Sería estúpido descartar a Alonso en la lucha por el título". Nadie tiene datos exactos, tan solo sospechas tras lo visto en los entrenamientos de invierno.

En este sentido, Vettel lamentó los probelmas de fiabilidad de su nuevo Red Bull en el último día en Barcelona. "Nos hubiera gustado hacer un poco más en el último día, pero creo que la fiabilidad no es un asunto desastroso".